educación
Detectados 20 posibles casos de acoso escolar durante este curso en Aragón
El teléfono habilitado por la DGA para atender denuncias de 'bullying' ha recibido 290 llamadas en lo que va de año académico.
En lo que va de curso, y con el coronavirus que ha suspendido las clases presenciales durante más de dos meses, en Aragón se han detectado 20 posibles casos de acoso escolar, derivados de las 290 llamadas que ha recibido el teléfono contra el 'bullying' desde la vuelta al colegio el pasado septiembre y hasta este 22 de mayo.
Este dato, facilitado por el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón, se ha reducido a prácticamente la mitad, ya que el curso anterior se registraron 38 probables malos tratos, lo que supone una caída de un 47,3%. Mientras, el número de llamadas registradas en el servicio telefónico también ha ido a la baja, aunque no se ha producido una disminución tan importante y se han aminorado en una cuarta parte. En este curso 2019-2020 se han contabilizado 290 frente a las 390 del 2018-2019, con una disminución de un 25,6%. Esta reducción de posibles situaciones de 'bullying', que según asociaciones de familias afectadas y expertos solo reflejan una mínima parte de la realidad que se vive en las aulas, sigue la línea de los últimos años.
Desde la puesta en marcha del teléfono contra el 'bullying' en la Comunidad, en mayo de 2016, se han recibido un total de 1.670 llamadas, que han dado lugar a 233 notificaciones de posible acoso escolar. Por el momento, el curso en el que más situaciones dramáticas se llegaron a detectar fue en 2016-2017 con 115, que en el curso 2017-2018 ya se limitaron a 60. Todas las denuncias que llegan a este recurso del Gobierno aragonés reciben un seguimiento por parte de los profesionales de la Asesoría de Convivencia y de Inspección Educativa.
¿Hasta qué punto el cierre de los colegios ha podido provocar esta caída de los posibles casos? Las asociaciones de víctimas de esta lacra social, como la Federación de Familias contra la Violencia en el Medio Educativo (Favme) y la delegación aragonesa de la Asociación Española para la Prevención del Acoso Escolar (Aepae), alertan de las dos caras de la moneda. Para los menores de primaria que sufren en las clases agresiones físicas o psicológicas y momentos de exclusión, el confinamiento puede haber supuesto un respiro al refugiarse en la tranquilidad del hogar. Sin embargo, los niños a partir de 10 años y adolescentes, que ya manejan las redes sociales, siguen sufriendo amenazas y violencias a través de la tecnología, que es el nuevo escenario para ejercer esta práctica.
Más allá de la disminución de las cifras oficiales, estos colectivos hacen un llamamiento para que ni las instituciones ni la comunidad escolar bajen la guardia ni ahora ni cuando se vuelvan a abrir colegios e institutos en septiembre. Insisten en que es un problema enquistado e invisibilizado que todavía cuesta que salga a la superficie.
El teléfono contra el acoso escolar de la DGA (900 100 456) ha seguido funcionando durante este tiempo (se trata de un servicio que se presta 24 horas los 365 días del año). De hecho, durante estos dos meses desde el Departamento de Educación se han redactado diversos documentos relativos a la prevención del ciberacoso y los riesgos que conlleva el elevado uso de internet que se está produciendo como consecuencia de la situación de confinamiento en la que se encuentra el alumnado aragonés. Así las cosas, y a través de una serie de infografías destinadas tanto al alumnado de las etapas de primaria y secundaria como a las familias, se explica en qué consisten las situaciones de acoso que se pueden dar: amenazas, insultos, robo de identidad o contraseñas, rumores relativos a la identidad sexual o contenidos de carácter sexual.
También se ha elaborado un documento que, bajo el título de 'En qué equipo juegas', pretende ofrecer al alumnado una serie de pautas para poder identificar si tienen un comportamiento responsable o, por el contrario, están desarrollando compartimientos inadecuados para su propia seguridad o de sus compañeros. Asimismo, se ofrecen una serie de recomendaciones para convertirse en un 'influencer' positivo reaccionando ante comentarios ofensivos, no reenviando contenidos inapropiados o mostrando empatía y apoyo a aquellas personas que puedan estar sufriendo cualquier tipo de acoso en las redes. Se trata, apuntan desde Educación, de "hacer también del espacio tecnológico un espacio de igualdad y de convivencia".
