coronavirus

Sariñena cierra el centro para recuperados de covid-19 tras controlar el brote de su residencia

Ha estado activo casi dos meses y en total, ha alojado de forma temporal a nueve usuarios, todos ellos procedentes del centro para positivos de Yéqueda. Otros nueve internos no han podido superar la enfermedad.

Juan y Miguel, los dos últimos en abandonar la residencia de covid de Sariñena
Juan y Miguel, los dos últimos en abandonar la residencia de covid de Sariñena
Heraldo.es

El Ayuntamiento de Sariñena ha echado el cierre a las instalaciones que acondicionó el pasado mes de abril para alojar de forma temporal a los internos de su residencia municipal que iban recibiendo el alta médica tras ganarle la batalla a la enfermedad covid-19.

El espacio, ubicado en el centro joven, fue habilitado ante la imposibilidad de que los usuarios regresaran a la residencia municipal, que fue puesta en cuarentena a finales del pasado mes de marzo, confinando a internos y trabajadoras, tras detectarse un importante brote de coronavirus, que ha causado la muerte de al menos nueve residentes con test positivo en covid-19.

Aunque el confinamiento se mantiene, el centro espera recuperar cierta normalidad en los próximos días, tras controlarse el brote detectado y además, haber sido dividido en zonas rojas y verdes, separando a negativos y positivos. Ahora mismo, según fuentes municipales, solo quedan cinco internos que sigan dando positivo en las PCR, «todos ellos asintomáticos y detectados hace varias semanas, sin que se hayan declarado nuevos contagios desde el inicio de la epidemia».

A lo largo de los dos últimos meses, un total de nueve internos han pasado por las instalaciones acondicionadas por el consistorio. Todos ellos han ido llegando procedentes del centro para positivos La Abubilla de Yéqueda, tras superar la enfermedad y dar negativo en la PCR. Allí todavía quedan internados dos usuarios de Sariñena, que, según explican desde el consistorio, podrán volver directamente a la residencia municipal cuando reciban el alta.

El consistorio espera que sea un cierre definitivo, pero advierte que la pandemia sigue activa y en consecuencia, insiste en la necesidad de "no bajar la guardia". De hecho, una vez desinfectado, el espacio se mantendrá acondicionado por si fuera necesaria su reapertura ante cualquier eventualidad.

Los dos últimos residentes en abandonarlo han sido Miguel Inglán y Juan Hernández, que llegaron el pasado 14 de mayo del centro La Abubilla de Yéqueda y que ya han podido ser trasladados a la residencia de Sariñena.

A través de sus redes sociales, el consistorio ha querido agradecer la labor desarrollada por todos aquellos que hicieron posible acondicionar este espacio en un tiempo récord, que pasó de centro joven a residencia en tan solo un fin de semana. Para ello, se contó con el apoyo de trabajadores municipales, voluntarios de Protección Civil, bomberos voluntarios coordinados por DPH, empresas locales o responsables de los servicios sociales de la Comarca de Los Monegros. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión