La Policía Nacional de la Jefatura Superior de Policía de Aragón ha detenido a una persona dedicada a la explotación sexual de mujeres extranjeras en Zaragoza, a las que les imponía una deuda por el viaje a España que debían satisfacer atendiendo clientes de este tipo de servicios. Gracias a esta intervención han conseguido liberar a cinco víctimas de trata de seres humanos con fines de explotación sexual.

Las investigación se inició a finales del año pasado, cuando se obtuvieron una serie de informaciones que apuntaban a una mujer como la encargada de varios pisos en los que se explotaba sexualmente a mujeres extranjeras en situación irregular en España que, por lo tanto, eran víctimas especialmente vulnerables.

Desde que se conocieron estos hechos, agentes de la Policía Nacional especializados en la investigación de delitos de trata de seres humanos se hicieron cargo de la investigación.

Pronto se dieron cuenta de que se trataba de una mujer a la que ya se había detenido tres años atrás por hechos de similares características. En aquella ocasión, cuatro víctimas de trata de seres humanos con fines de explotación sexual fueron liberadas en Zaragoza, a quienes, además de prostituirse, se les obligaba a consumir y suministrar sustancias estupefacientes como cocaína, a los clientes.

La investigación actual se vio dificultada por la experiencia adquirida y las medidas adoptadas por esta mujer para no ser nuevamente descubierta por la Policía.

La detenida se encargaba de facilitar los medios de viaje a España de las extranjeras que buscaban una vida mejor en nuestro país, a las que a su llegada, les imponía una deuda por las gestiones del viaje de entre 3.000 y 5.000 euros según las investigaciones que se barajan. Además, también se lucraba de la prostitución de otras mujeres que habían llegado a Zaragoza introducidas en el país por otros grupos criminales dedicados igualmente a la trata de seres humanos para su explotación sexual, con los que ya habían terminado de saldar sus deudas. Por lo tanto, eran víctimas por partida doble.

Ella era la encargada de gestionar sus anuncios ofreciendo servicios sexuales en páginas especializadas de internet, se encargaba del contacto con los clientes, imponía horarios, ciertas condiciones de trabajo y los precios que debían cobrar, pudiéndose averiguar que además, cobraba una comisión por servicio a las víctimas.

Las investigaciones también han permitido constatar que estaba explotando simultáneamente a cinco mujeres extranjeras que no solo ejercían en Zaragoza, sino que también las trasladaba a provincias limítrofes por temporadas cuando el 'trabajo' flojeaba aquí.

Fruto de la colaboración con distintas ONG sin ánimo de lucro que se dedican a asistir a este tipo de mujeres, se pudo averiguar que la principal investigada era beneficiaria de recursos sociales, que inmediatamente le han sido retirados.

En total han sido cinco las mujeres extranjeras identificadas y liberadas, víctimas de estos hechos, habiéndose procedido en recientes fechas a la detención de la investigada y a su puesta a disposición de la Autoridad Judicial competente.