El Gobierno autoriza la caza y la pesca a partir del lunes y estudia beneficios para el medio rural

Aragón retomará la caza y la pesca a partir del lunes, al estar en la fase 1 de la desescalada. Así se decidió este viernes en un consejo intersectorial de Sanidad en el que la nueva consejera, Sira Repollés, entregó una petición formal de la DGA para que se flexibilicen las restricciones en el medio rural. El Gobierno permitirá en las provincias en la fase 1 que retomen la actividad comercial los negocios con más de 400 metros cuadrados siempre que limiten la superficie al máximo autorizado. Y autorizó, además, la reapertura de los centros de día, aunque desde la Consejería de Ciudadanía anunciaron que no se aplicará de momento "para dar más seguridad al sector más vulnerable". Aunque se esperaba un pronunciamiento expreso sobre el uso de las mascarillas en la vía pública, se aplazó la decisión definitiva. Para la presidenta del Colegio de Médicos de Zaragoza, Concha Ferrer, como es difícil mantener la distancia social de dos metros "sería interesante" utilizarlas.

La recuperación de la caza y la pesca ha sido una de las reivindicaciones de Aragón durante este proceso. Para el consejero de Agricultura de la DGA, Joaquín Olona, se trata de una medida "imprescindible" para controlar la sobrepoblación de las especies cinegéticas que causan "cuantiosos daños" en las tierras de cultivo y son un "enorme riesgo" para la ganadería, e incluso para los propios ciudadanos. En cuanto a la caza y la pesca deportiva, el consejero confió en que cazadores y pescadores vayan a hacer un "uso responsable de esta flexibilidad" y en que sigan "las recomendaciones y obligaciones sanitarias que impone la situación en la que nos encontramos". Olona pidió sobre todo extremar la prudencia y cumplir las normas.

El presidente de la Federación Aragonesa de Caza, Fernando Tello, se felicitó de la medida. Le parece "incomprensible" que no se hubiera autorizado antes, pensando en los daños ocasionados por algunas especies y teniendo en cuenta las modalidades ahora vigentes, "porque vas al campo en solitario o con una persona".

Respecto a los beneficios en el medio rural, declinaron desde la DGA confirmar el tamaño de los municipios a los que se dirige su propuesta. Y parece que esta vez el Ejecutivo de Pedro Sánchez estaría en disposición de tenerla en cuenta. La propia vicepresidenta Teresa Ribera adelantó el jueves en la Comisión de Transición Ecológica y Reto Demográfico que valoran un avance más rápido para los municipios con menos de 3.000 habitantes porque "tiene poco sentido mantener las mismas restricciones que en las grandes urbes". Desde el Ejecutivo de Javier Lambán confiaban en que algún avance se pueda concretar este mismo fin de semana. A partir del lunes los esfuerzos se centrarán en preparar los informes para solicitar el paso a la fase 2 de las zonas que ahora están en la 1, y que suponen casi el 70% del territorio, con 32 millones de habitantes.

Otra de las novedades que introducirá desde el lunes el ministerio para los municipios de la fase 1 es la apertura de establecimientos comerciales de más de 400 m2, siempre y cuando delimiten su superficie al máximo permitido. José Antonio Pueyo, presidente de la Federación de Empresarios del Comercio y Servicios de Zaragoza (Ecos), trasladó ayer su valoración: "Parece que al Gobierno le han surtido efecto ciertas presiones desde la gran distribución. En principio, la oferta estaba satisfecha con los comercios ya abiertos". "Es más difícil –dijo– controlar el contagio en los locales más grandes". Y puso de manifiesto que para desplazarse a estos muchas veces se requiere un vehículo o transporte público, ya que suelen situarse en el extrarradio.

Llamamiento a la "prudencia"

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, volvió a hacer ayer un llamamiento a la "cautela, prudencia y seguridad". Aunque reconoció que, tras más de ocho semanas en estado de alarma, "la ciudadanía está teniendo un comportamiento ejemplar", apeló a la "responsabilidad individual" ante "acciones irresponsables", en alusión a "terrazas donde no se respetan las distancias de seguridad". Illa abordó con los consejeros del ramo de las comunidades si se establece como obligatorio el uso de mascarillas en los espacios públicos para prevenir los contagios. Sin embargo, según adelantó, aún están "estudiando" esta decisión: "Estamos en permanente revisión de estas medidas, intentando adaptarnos de la mejor forma posible a cómo evoluciona la epidemia". El titular de la cartera de Sanidad recordó que las mascarillas ya son obligatorias en el transporte público y "altamente recomendables" siempre que no se pueden guardar los dos metros de distancia de seguridad.

La opinión de los sanitarios

Para la presidenta del Colegio Oficial de Médicos de Zaragoza, Concha Ferrer, "con una buena higiene de manos y a dos metros, no haría falta mascarilla, pero como eso es muy difícil y en algunos casos hasta imposible, sería interesante ponerse una". La quirúrgica "sería suficiente para el espacio público, porque evita que el que es positivo contagie". Y es efectivo, destacó, "cuando la mayor parte de la población lleva una mascarilla convencional". "Eso es conciencia social, y desgraciadamente en ese sentido no tenemos mucha", subrayó.