La crisis del coronavirus ha hecho que todo lo demás haya quedado en un segundo plano, incluida la transición justa, que el pasado viernes daba un nuevo paso con el acuerdo entre el Gobierno de España, los sindicatos y las empresas titulares de las centrales de carbón.

La pandemia ha obligado a retrasar todos los plazos. En marzo, según anunció la vicepresidenta para la Transición Justa y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, tendría que haberse firmado el protocolo previo al convenio de transición justa. Tampoco empezarán este mes de abril los cursos de formación que Endesa recogía en su plan de acompañamiento, imprescindibles para que el personal de las subcontratas pueda incorporarse a los trabajos de desmantelamiento a partir del 30 de junio.

Fuentes de la eléctrica confirmaron a este diario que dichos cursos, de los que iban a beneficiarse hasta 200 trabajadores, están ahora "en suspenso", supeditados a cómo evolucione la situación. La previsión era que hubiesen empezado a finales de mes, un plazo inviable con las actuales medidas de confinamiento.

La intención, según ha trasladado Endesa a sus trabajadores, es que puedan arrancar en junio, unos días antes de la ‘fecha oficial’ de cierre, ya que, por el momento, se descarta hacerlos ‘online’. Todo dependerá, no obstante, de cómo haya evolucionado la crisis y las restricciones impuestas por el Gobierno central para frenar la expansión del virus.

Los trabajadores consultados ven "perfectamente comprensible" este retraso, ya que ahora, coinciden, la prioridad es "erradicar el virus y restablecer la normalidad cuanto antes".En su opinión, este cambio de fechas no restará oportunidades a los trabajadores de las subcontratas, ya que, teniendo en cuenta todos los preparativos necesarios, el desmantelamiento podría no empezar "hasta septiembre u octubre".

En lo que respecta al protocolo de transición, en el que se recogerá el compromiso expreso de las administraciones para impulsar inversiones y planes de reactivación económica, fuentes del Ministerio aseguraron a preguntas de HERALDO que se firmará "de forma telemática". Dichas fuentes recalcaron que el Ejecutivo central "mantiene activas sus líneas de trabajo dentro del marco de actuación que permite la situación actual de excepcionalidad". 

"Esto empeora todo aún más"

Actualmente, los esfuerzos se centran en analizar las propuestas y proyectos sugeridos por los más de 70 agentes sociales tras la reunión de finales de febrero en Andorra. "Hemos recibido un correo en el que se nos comunica que se atrasan los plazos y se amplía el periodo de sugerencias tanto como sea necesario, más allá de las fechas indicadas", explicó Antonio Planas, delegado de CC. OO. en la central térmica de Andorra.

Los sindicatos temen que la lucha contra el coronavirus, que ha obligado a todas las administraciones a redistribuir sus presupuestos, reste recursos a la transición justa, ya sea a corto o largo plazo. "Todo esto empeora aún más las cosas", afirmó Planas. En esta línea, el secretario general de UGT en Teruel, Alejo Galve, reconoció que los ánimos están ahora centrados en combatir el virus. "Esperemos que las ayudas no se vean reducidas. Estamos a la espera de ver qué sucede", dijo. El Ministerio tiene, además, que autorizar el cierre de la central, solicitado por Endesa en diciembre de 2018.