El Hospital San Juan de Dios tiene 188 camas para ancianos y en cinco pruebas de virus ha dado negativos

El geriatra José Luis Bonafonte dice que el coronavirus reduce las visitas de los familiares y se cierran pruebas como bucodentales.  

El geriatra coordinador del Hospital San Juan de Dios, en su despacho.
El geriatra José Luis Bonanfonte, coordinador del Hospital San Juan de Dios, en su despacho.
Heraldo

El Hospital San Juan de Dios tiene casi llenas las 188 habitaciones que ofrecen a los enfermos (más de un 85% están ocupadas, aunque el pasado viernes hubo veinte altas), cuya edad media está entre 80 y 85 años, aunque todavía ninguno de ellos han dado positivo en el coronavirus de los cinco que se han realizado porque mostraban riesgos. El primer caso sospechoso, un hombre de 86 años, que mandaron esta semana a Salud Pública dio negativo, y ahora tienen un segundo de una mujer de 101 años, que también ha dado el mismo resultado después de hacerle la prueba porque era sospechosa. Otras tres pruebas realizadas han dado negativo. 

El médico geriatra José Luis Bonafonte, coordinador de la unidad de Geriatría del Hospital San Juan de Dios, explicó que están aplicando el protocolo oficial, al que añaden el del centro, para estrechar la vigilancia de los ancianos. Detalló que tienen que transcurrir catorce días desde que inician las investigaciones.

«Lo más importante es si tiene alguna infección respiratoria, tiene flemas, sufre fiebre y saber si ha realizado algún viaje a zonas de riesgo como China, Italia o Corea», precisó el geriatra José Luis Bonafonte. «Pero además aportamos nuestros criterios médicos para conocer si han mantenido contactos con otros afectados, así como aplicar nuestro protocolo al conocer si proceden de una residencia», enumeró.

Sin voluntaruos y un familiar 

La crisis del virus del coronavirus ha provocado que los voluntarios que acuden a a visitar a los ancianos ingresados se han suspendido desde ayer (miércoles) y solo se permite la visita de un familiar por cada enfermo para evitar que haya reuniones en las habitaciones. También se ha dejado el gimnasio para los más enfermos graves y se han cerrado las pruebas bucodentales, que no son tan necesarios en medio de la pandemia, así como la cafetería. 

El geriatra José Luis Bonafonte agregó que en los hospital del Servet y el Clínico se hacen más cribas para evitar que los positivos de coronavirus no salgan de estos centros hospitalarios, aunque la unidad de agudos del hospital San Juan de Dios acoge a enfermos mayores y frágiles que no tengan infecciones respiratorias.

La directora del hospital, Carmen Vicente, explicó que tanto el San Juan de Dios como el Provincial están siendo utilizados estos días para remitir ancianos del Clínico y el Servet que no tienen problemas respiratorios como insuficiencia cardíaca o ictus para aliviar los centros utilizados para la batalla contra este virus. "El viernes dimos veinte altas y las familias reciben mejor en esa situación. Cada día llamamos al Servet para ver si necesitan remitirnos algunos pacientes. Hoy nos han pedido cuatro", precisa Vicente. "Trabajamos con adelanto y los que tenían problemas de respiración se enviaban al Servet". 

Asimismo, en los dos vehículos de la unidad de atención domiciliaria del hospital San Juan de Dios están más dotados con equipaje para los equipos con médico y enfermero ante la posibilidad de que los que atiendan sufran coronavirus.

El hospital San Juan de Dios tiene preparada una zona de cuatro habitaciones para seis pacientes aislada ante la eventualidad de que alguno de sus pacientes diera positivo en el control que hagan de coronavirus. Está preparada con el material EPI (Equipo de Protección Individual) necesario para los enfermeros y médicos que puedan aislarse de los pacientes mientras sean tratados.

Aun así, la voluntad de Salud Pública es que todos los enfermos ingresados estén en los hospitales del Servet y el Clínico afectados por neumonía, o bien permanezcan en sus domicilios en cuarentena durante 14 días.

Teletrabajo de los trabajadores 

El centro hospitalario ha puesto en marcha el teletrabajo para los trabajadores que pueden aplicárselo y puede enviar a su domicilio una treintena de los empleados. De hecho, la directora Carmen Vicente ya se trasladó el pasado jueves a su domicilio porque le habían realizado una prueba de coronavirus a un familiar en su domicilio, que resultó negativa al final. Aunque era una adolescente, tenía riesgo con otros tres compañeros del colegio y aceptaron que le hicieran el análisis, pero dio negativo.

«Mantengo toda la jornada en contacto a través del ordenador y el móvil con el hospital sin ningún problema», explica Carmen Vicente, directora del San Juan de Dios.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión