"Esperamos que una mujer sea la próxima presidenta del Supremo"

¿Cómo está la Justicia tras el juicio del ‘procés’ en el Supremo?

La Justicia ha cogido protagonismo en el Supremo con casos como el de La Manada, la sentencia del ‘procés’, los recursos de la Gurtel, las hipotecas o los trabajos precarios en grandes plataformas... Hay desde delincuencia común a nuevos retos con economía global, como la regulación de las nuevas plataformas digitales, con el transporte con conductor

o los arrendamientos de viviendas con fines turísticos. En mi conferencia hablo de la dificultad del Supremo de resolver situaciones tan complejas porque no se afronta solo situaciones jurídicas sino económicas o sociales.

¿Qué reclaman los magistrados del Tribunal Supremo?

Reivindicamos que el legislador haga una regulación muy clarificadora que atienda a los diferentes intereses que confluyen.

En Zaragoza el conflicto de los taxistas y Cabify está a punto...

Viene de la revolución tecnológica y la era digital. Las relaciones ya no son entre los prestadores del servicio y el usuario sino también de plataformas digitales, lo cual modifica los contactos tradicionales. Como fue la revolución industrial en 1860, que cambió las relaciones sociales con el progreso de la sociedad, pero también creó incertidumbre. Por eso pedimos la centralidad de la política para que el Congreso concilie los intereses y que los tribunales no tengamos que resolverlo con una respuesta insatisfactoria para algunos sectores.

...un Gobierno contundente.

Pedimos una mayor regulación o como dicen los ingleses «better and smart regulation». Es decir una mejor y más inteligente regulación. Los temas afectan al entorno urbano: la movilidad, las relaciones con los usuarios, precios y causas medioambientales con alternativas con los coches eléctricos. Un tema de transporte afecta a sectores sociales y económicos. Yo he redescubierto la nueva Zaragoza.

¿Qué opina de esa transformación urbana de Zaragoza?

Me fui Barcelona y luego a Madrid, pero la ciudad de Zaragoza se ha transformado positivamente. Es una ciudad moderna, ecológica y culturalmente avanzada. Me gustan mucho sus plazas históricas y el pequeño comercio. Eran expectativas que teníamos cuando éramos jóvenes y ese sueño se cumplió. Es agradable y cálida. Más cómoda que las megalópolis como Madrid, México o Tokio, donde se concentra la población con problemas de movilidad y calidad de vida. Hay un retorno a las ciudades intermedias como Zaragoza, Valencia, Sevilla o Bilbao para el futuro.

Una sentencia que dictó aceptó la segregación de Villamayor. ¿Hay más casos?

Hemos tenido más casos como Villamayor, pero no de Aragón sino en Cataluña, Castilla-León y Asturias por la identidad localista y agravios de barrios rurales con los servicios recibidos frente a la ciudad. Hay que hacer políticas globales para todos los habitantes de los entornos rurales y garantizar su calidad en educación, movilidad o educación.

¿Qué opina de nombrar a la exministra como fiscal general?

En el sistema judicial norteamericano, el fiscal general es el ministro de Justicia. No hay separación alguna. El hermano del presidente John F. Kennedy fue fiscal general y no pasó nada. El sistema español es garantista y el estatuto de los fiscales permite que actúen con autonomía e independencia, como los aragoneses Javier Zaragoza y Fidel Cadena. Lo importante es cómo ejerza su función la nueva fiscal general.

¿Hay conflictos con la economía ecológica de aerogeneradores?

Es complejo porque estamos en la transición ecológica. Las energías renovables son más competitivas y el precio más bajo. En Aragón no hay conflictividad, pero en otras se anularon permisos por no respetar la competencia.

¿Quién presidirá el Supremo?

Esperamos que el futuro presidente sea una mujer.