Tercer Milenio
En colaboración con ITA
coronavirus
La Universidad de Zaragoza deja de publicar el mapa del contagio por coronavirus por falta de datos fiables
Los investigadores esperan recibir los datos oficiales del Salud y continúan trabajando en el modelo matemático sin dar a conocer sus resultados.
"A causa de la falta de datos de fuentes oficiales que informen de manera fiable y actualizada de los nuevos casos detectados y su localización, lamentamos comunicar que debemos interrumpir las actualizaciones de este mapa con fecha de última actualización: 3 de marzo de 2020. Nuestro equipo seguirá trabajando para poder ofrecer nuevos análisis pronto". Este es el aviso que puede leerse en la página web en la que hace unos días se podía consultar un mapa que predecía los nuevos contagios por coronavirus elaborado por un grupo de investigadores de la Universidad de Zaragoza y de la Universitat Rovira i Virgili (URV).
Estos científicos han desarrollado un modelo matemático que permite hacer predicciones del riesgo de nuevos casos de contagio del COVID-19 que existe en los municipios de España y lo plasman en un mapa que hasta hace unos días se actualizaba diariamente. Una publicación que ahora se encuentra en un compás de espera.
La razón de este parón temporal la explica el físico Jesús Gómez-Gardeñes, profesor en el Departamento de Física de la Materia Condensada, que pilota este trabajo con su equipo desde la Facultad de Ciencias del campus público aragonés Para llevar a cabo su trabajo requerían dos datos fundamentales, el lugar de residencia de la persona contagiada y si se trataba de un caso importado o no. Ambas informaciones las iban obteniendo de los medios de comunicación, pero cuando el número de contagios se empezó a disparar y superó el centenar ya les resultó imposible obtener estos datos con el rigor que precisan.
"Hemos recurrido a solicitar la información oficial a través del Salud porque necesitamos una fuente de datos continua, periódica y oficial, pero de momento no hemos obtenido una respuesta. En estos momentos hay que entender que pueden estar desbordados y los temas prioritarios son otros. De todas formas, confíamos en poder contar con los datos rigurosos", apunta Gómez-Gardeñes.
En cualquier caso, este investigador aclara que los dos equipos de investigadores siguen trabajando "de puertas hacia dentro con la misma intensidad", pero que, de momento, lo que no van a hacer es hacer públicos sus resultados "sin tener constancia de que los datos son los que son". Su tarea se centra en una doble vertiente. Por un lado van mejorando el modelo, ya que al tratarse de un virus nuevo "las características de su propagación se van conociendo y cada día salen avances que tenemos que ir incorporando". Por otra parte, continúan utilizando esta nueva herramienta con los casos que van surgiendo y de los que pueden obtener por sus propios medios la información que necesitan.
