Política

Aragón lanza un plan de acción contra las tergiversaciones históricas catalanas

La DGA creará una página web con informes del Consejo Asesor para rebatir estas alteraciones y reforzará la formación al profesorado con cursos y congresos

El Consejo Asesor para la Enseñanza de la Historia, en su reunión de ayer en el Pignatelli
El Consejo Asesor para la Enseñanza de la Historia, en su reunión de ayer en el Pignatelli
DGA

Aragón se reforzará contra las tergiversaciones históricas del nacionalismo catalán con un plan de acción que incrementará la formación del profesorado, introducirá la historia de Aragón "de manera transversal" en el currículo educativo y expondrá, a través de una página web, las manipulaciones que se detecten en libros de texto, publicaciones y materiales digitales. También promoverá acciones didácticas junto a la Biblioteca Nacional de España, entre otras iniciativas.

El Ejecutivo autonómico convocó ayer, por primera vez en esta legislatura –y segunda desde su creación–, al Consejo Asesor para la Enseñanza de la Historia a fin de establecer unas líneas de acción que garanticen una historia "única, libre y rigurosa" que se escriba desde la academia y la universidad y no desde la política.

La DGA asegura estar trabajando ya junto a otros departamentos vinculados con la imagen exterior de la Comunidad para utilizar "todos los canales posibles" de cara a posicionarse y hacer valer su condición de elemento nuclear y fundador de la Corona de Aragón.

El Ejecutivo autonómico será especialmente incisivo a la hora de exigir rectificaciones. El Consejo Asesor emitirá un informe cada vez que se detecte una tergiversación, un documento que será público y que se colgará en la página web de dicho organismo.

Fuentes del Departamento de Educación garantizan que se seguirá actuando con rapidez y que, en adelante, el consejo no se limitará a resolver consultas y dudas particulares, sino que "tomará la iniciativa para fomentar el conocimiento de la historia aragonesa.

En el plano educativo, se integrará "de manera transversal" en el currículo, de modo que no sea solo una asignatura, sino que se trabaje "en diferentes materias". Esta iniciativa, pensada sobre todo para secundaria y bachillerato, se aplicará, por ejemplo, en Oratoria, donde se promoverán debates sobre aspectos concretos de la historia de Aragón.

El consejo prevé elaborar, además, una serie de fichas con datos de interés sobre Aragón y su pasado a fin de que los docentes puedan aplicar estos conocimientos a las distintas asignaturas, un trabajo que, en un futuro, esperan subir a internet.

Una carrera de fondo

En lo que respecta a la formación del profesorado, la DGA se compromete a dar difusión a seminarios de historia que se impulsen desde la Universidad de Zaragoza y a trabajos de sus grupos de investigación. Se buscará, asimismo, que los docentes participen en foros donde se aborde la actualización. El año pasado se celebraron las I Jornadas de Metodología de la Historia y las Ciencias Sociales, y de cara al segundo trimestre de este curso se va a promover la celebración de un segundo foro.

Se realizarán, por otra parte, unidades didácticas sobre la historia de Aragón que serán utilizadas dentro de la herramienta BNE Escolar de la Biblioteca Nacional, que ofrece a los docentes trabajos para realizar en las aulas.

El Consejo, integrado por representantes de la DGA y catedráticos y profesores de la Universidad de Zaragoza, y al que ayer se unió el director general de Cultura, Víctor Lucea, volverá a reunirse en enero. Guillermo Fatás, catedrático emérito de Historia Antigua, espera que las medidas planteadas contribuyan a frenar las tergiversaciones. "Pero no se pueden esperar milagros. Es un combate en el que no hay que decaer", dijo.

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