sanidad
Salud realizó en Aragón 3.920 inspecciones a negocios cárnicos e impuso 43 sanciones
Del medio millar de muestras analizadas durante 2018, once dieron positivo en listeriosis.
¿Qué controles pasa un producto hasta que se sirve? Esta pregunta no salta muchas veces hasta que no se produce alguna crisis alimentaria como la de la listeriosis. Salud Pública llevó a cabo el año pasado 33.830 inspecciones a establecimientos aragoneses relacionados con la alimentación. De ellas, 3.924 fueron a negocios en los que se procesan carnes y derivados, similares a la fábrica sevillana Magrudis de la que salió la carne contaminada. En la Comunidad hay 1.983 locales en este sector. A raíz de los incumplimientos que se detectaron en estas empresas y locales se impusieron 43 sanciones.
Estos son algunos de los datos que revela el informe del Plan Autonómico de Control de la Cadena Alimentaria en Aragón 2017-2020 y que ayer adelantó Alberto Alcolea. jefe de Servicio de Salud Alimentaria y Ambiental del Ejecutivo autonómico.
Los incumplimientos que se observan durante estas ‘supervisiones’ pueden ser de tres tipos, explicó Alcolea. El primero son los estructurales, en los que se atiende a las condiciones generales de higiene, que se refieren a las condiciones de estructura física del establecimiento. Otras infracciones son las operacionales, que tienen que ver con las actividades que se realizan. Otros fallos pueden proceder del producto en sí, vinculados a las propias características organolépticas o físicoquímicas, incluyendo las deficiencias de etiquetado.
Ante los incumplimientos que se detectaron, se abrieron 1.165 expedientes a establecimientos de alimentación, la medida más común que se adopta, y se impusieron 665 sanciones. En el caso de los negocios que tratan carne y derivados, se tramitaron 59 expedientes y se aplicaron 43 multas.
Estas infracciones también motivaron 52 suspensiones de actividad en locales del sector alimentario que «suelen ser temporales hasta que se solventa el problema», detalló Alcolea. «Una fue en un producto cárnico, que provocó también una alerta general, y otra en alimentación especial y complementos», detalló.
Vigilar la bacteria listeria
El plan autonómico incluye también un programa de vigilancia específica de la bacteria listeria en artículos cárnicos para el consumo. En el año 2018 se tomaron 32 muestras de productos y 46 de superficies de trabajo, instalaciones o útiles. De estas 48, una dio positivo en producto y otras ocho en superficies.
Para detectar posibles contaminaciones en otros artículos como pescados, huevos, leche, cereales, vegetales, turrones o helados, se analizaron 463 muestras. Al balance final hay que sumar otros dos productos contagiados: un pescado ahumado y un queso elaborado con leche cruda.
Para el jefe del Servicio de Salud Alimentaria y Ambiental estas cifras entran dentro de lo esperado. "Estamos muestreando mucha variedad de productos y el que salga no es extraño. Es un germen que está muy extendido. Con unas medidas higiénicas apropiadas en las superficies, las manipulaciones y las materias primas que se utilizan se controla lo suficiente como para que no se provoque ninguna alerta", concluyó.
"Estamos en unos niveles de detección de listeriosis mínimos"
"Nosotros estamos en unos niveles de detección de listeriosis mínimos. Vamos a seguir trabajando como hasta ahora, a no ser que a nivel estatal se considere adoptar alguna medida especial o más intensa", aseguró ayer el jefe de Servicio de Salud Alimentaria y Ambiental de la DGA, Alberto Alcolea.
Tras estos controles, en los que trabajan los Departamentos de Agricultura, Ciudadanía y Derechos Sociales y Sanidad, hay un equipo humano de 292 personas entre personal de gestión, técnicos de laboratorio, inspectores veterinarios y farmacéuticos y personal de laboratorio. En los últimos meses se ha ampliado la plantilla para atender los nuevos mataderos y especialmente el que abrirá sus puertas en San Esteban de Litera.
La Comunidad no ha registrado nuevos casos de listeriosis. El Ministerio de Sanidad confirmó ayer un total de 203 relacionados con el consumo de carne contaminada, de los que 196 son en Andalucía, tres en Aragón (la familia andaluza que veraneaba en Jaca), dos en Extremadura y uno en Castilla y León y Madrid. Hay otros posibles cuatro afectados en Aragón.
