PP y Cs insisten al PAR para que rompa con el PSOE porque las urnas "hablaron claro" el 26-M

Ni el PP ni Ciudadanos están dispuestos a tirar la toalla y mantienen vivo su pacto para gobernar Aragón pese a que el socialista Javier Lambán tiene allanada su investidura y ambos partidos han roto su alianza en el Ayuntamiento de Huesca. Tanto el presidente del PP-Aragón, Luis María Beamonte, como el portavoz de Cs en las Cortes, Daniel Pérez Calvo, han insistido este miércoles al PAR para que se desentienda del acuerdo que firmó con el PSOE la semana pasada para gobernar en coalición y se sume a su proyecto "moderado y de centroderecha", aunque dependa de los votos de Vox.

Beamonte ha emplazado a los aragonesistas a preguntarse si se van a sentir "cómodos de la mano de Podemos e IU", ya que la coalición PSOE-PAR solo tiene asegurados 30 de los 67 votos en las Cortes y estará subordinada al voto del resto de la izquierda para sacar adelante sus cuentas o cualquier iniciativa parlamentaria.

El líder popular, como también viene diciendo el portavoz naranja, ha incidido en que en Aragón hubo un voto mayoritario de centroderecha el pasado 26 de mayo y ha conminado a los aragonesistas a escuchar el mandato de las urnas. "Los ciudadanos hablaron y manifestaron que en Aragón existía la posibilidad de un proyecto moderado, de centroderecha. Los aragoneses fueron claros", ha dicho.

En su afán por convencer al líder del PAR, Arturo Aliaga, ha enfatizado que dependerá de un partido, Podemos, que en los últimos cuatro años les ha «agredido» con el plan de depuración y Sarga y con el que ha mantenido diferencias insalvables sobre la escuela concertada y en materia impositiva. "Reflexione, sigue teniendo las puertas abiertas para seguir conformando una alternativa moderada y centrada junto a Ciudadanos. Sus votantes están convencidos de que el PAR no es precisamente Podemos", ha apuntado.

En la misma línea se ha mostrado la formación naranja, que ha subrayado la "incompatibilidad" del PAR y Podemos a la hora de conformar "cualquier programa de gobierno". Su portavoz en las Cortes ha considerado que se trata de un "pacto de supervivencia" y que a los aragoneses les va a costar entender que un partido de centroderecha como el PAR pueda llegar a un acuerdo de gobierno "con fuerzas antagónicas como Chunta y Podemos". Así, ha aludido a sus diferencias respecto al impuesto de Sucesiones, la unión de estaciones de esquí, las obras del Pacto del Agua o la concertada.

Por todo ello, Daniel Pérez Calvo ha pedido a los aragonesistas que hagan una "reflexión serena pensando en los aragoneses y en el futuro de Aragón", aunque tampoco ha ahorrado las críticas por las redes sociales: "Allí donde los pactos de gobierno se dirimen entre quienes no tienen un proyecto para Aragón, sino para su propia supervivencia política, Ciudadanos seguirá trabajando, desde la responsabilidad, anteponiendo siempre el interés de los aragoneses a todo lo demás".

La unión de acción entre el PP y la formación naranja tendrá este jueves su reflejo en la constitución de la Mesa de las Cortes, ya que los conservadores respaldarán en la votación a Ramiro Domínguez como vicepresidente segundo y se quedarán con la secretaría segunda, que ocupará el nuevo diputado popular Jesús Fuertes.

Ante las críticas a la cesión, Beamonte ha reconocido la generosidad de sus socios para asegurar las alcaldías de Zaragoza, Teruel, Barbastro, Monzón, Tarazona, Fraga, Calatayud o Alcorisa. Y sostuvo que la cuestión de Huesca era un tema «absolutamente diferente».

Aliaga se muestra firme

Sus llamamientos a los aragonesistas han caído, una vez más, en saco roto y se han reafirmado en el acuerdo programático con el PSOE para gobernar Aragón. Su presidente, Arturo Aliaga, ha recordado que el "ADN de PAR es incompatible con Vox" como para depender de sus votos, al igual de que con Podemos "en algunas cuestiones" como la concertada y grandes proyectos, entre los que ha citado la Travesía Central o la conexión eléctrica con Francia. Por ello, ha descartado que haya "elementos" para gobernar en coalición con la formación morada, ya que el acuerdo programático con el PSOE es de "centralidad" y el PAR no piensa moverse. "Si no se respeta, se romperá y el acuerdo será nulo de pleno derecho", ha dicho Aliaga.