Nueva agresión a un trabajador sanitario. Un celador del servicio de Urgencias del hospital Miguel Servet de Zaragoza sufrió la semana pasada el ataque de un paciente que estaba siendo trasladado a otra zona del centro sanitario.

Debido a la fuerza que empleó el enfermo, al lugar acudieron varios trabajadores, pero fue el celador quien recibió la mayoría de golpes. Según ha podido saber este periódico, el celador ha tenido que ser escayolado de un brazo por las lesiones sufridas.

Fuentes del hospital Miguel Servet de Zaragoza han lamentado los hechos y han insistido en que el centro está trabajando en un plan de prevención de la violencia en los lugares de trabajo, con algunas iniciativas y medidas organizativas. Han recordado que este plan se enmarca en el resto de acciones que el Departamento de Sanidad ha puesto en marcha para prevenir o evitar las agresiones a sanitarios. La semana pasada, en el centro de salud de Univérsitas de Zaragoza, donde en pocos meses se han registrado dos agresiones, ha implantado un botón de alerta en los ordenadores y cámaras de seguridad. Además, el 061 cuenta con diez dispositivos para que los trabajadores puedan usar en las visitas a domicilio.

Los trabajadores han mostrado su rechazo a esta nueva agresión. El portavoz de Sanidad de CSIF, Evangelino Navarro, ha condenado los hechos y# ha confiado en que este nuevo incidente tenga la misma respuesta social que las registradas durante los últimos meses. Ha abogado por implantar medidas de seguridad disuasorias, cámaras o vigilantes de seguridad, como manera más efectiva para evitar las agresiones.

Ha asegurado que, de momento, las pruebas con el botón de alerta en Univérsitas no están dando resultados. “Parece que no está funcionando. Sería más efectivo un dispositivo que los sanitarios puedan llevar encima y puedan presionar en cualquier momento”, ha asegurado este martes.

Los médicos de Zaragoza contarán con un seguro de incapacidad tras una agresión