trabajo

Con huella dactilar o firma: llega el registro para controlar las horas extra en la jornada laboral

A partir de este domingo, todas las empresas, independientemente de su tamaño tendrán la obligación de disponer de un sistema que controle las horas trabajadas de sus empleados.

Infografía sobre los sistemas biométricos
Infografía sobre los sistemas biométricos
Pilar Ostalé

A partir de este domingo, las horas descontroladas de trabajo llegarán a su fin y es que entrará en vigor el decreto que obligará a todas las empresas, independientemente de su tamaño, a registrar la hora de comienzo y de finalización de la jornada laboral de sus empleados con el objetivo de reducir las horas extras no pagadas que, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), fueron el 46%. 

El sistema utilizado para controlar el inicio y el fin de la jornada de los empleados dependerá de la propia  empresa que elegirá qué método escoger según sus características y puede ir desde tarjetas de identificación, hasta la clásica firma en el papel pasando por aplicaciones web. Sin embargo, uno de los que más se están extendiendo por su grado de fiabilidad, la facilidad del registro y su dificultad para suplantar la identidad del empleado son los sistemas biométricos.

Estos permiten que el trabajador se identifique a la llegada a su lugar  trabajo a través de rasgos propios que son únicos e irrepetibles, como la huella dactilar, el reconocimiento facial o el iris, aunque este último no está tan implantado en España, según explica Caridad de Ugarte, responsable de comunicación de la empresa Almas Industries B+Safe.

"La clave del reconocimiento de la huella es que no te hace un escaneo, como pueden hacer los móviles o dispositivos electrónicos, sino que te toma una serie de minucias y eso unido al calor que emana del dedo genera un código alfanumérico que no se puede hackear", cuenta de Ugarte. Pero, ¿qué ocurre si las jornadas laborales de algunos trabajadores comienzan antes de que lleguen al lugar de trabajo donde se encuentra el lector de huella?

Los sistemas biométricos cuentan, además de con un lector, con un software que permite que los empleados a través de una tablet o de su teléfono móvil indiquen el inicio de su jornada sin necesidad de llegar al trabajo. Sin embargo, en este caso se hace un "control relativo y menos fiable" porque no se puede garantizar que sea el empleado quien active el inicio de la jornada, explica Caridad de Ugarte. Además, también entra en juego la privacidad del empleado.

En este sentido, la secretaria de Acción Sindical de Comisiones Obreras (CCOO) Aragón, Sonia García, explica que se deben utilizar sistemas "que no sean invasivos y que tengan en cuenta la ley de protección de datos del usuario". "En la normativa no se dice qué sistema se tiene que utilizar porque cada empresa debe adaptarse a sus circunstancias pero sí que se respete al empleado porque no se puede pretender controlar cada movimiento que haga", explica García quien añade que el "registro de la jornada laboral servirá para poner blanco sobre negro y mostrar a las empresas si están cumpliendo con la normativa o no y demostrarles si el ritmo de trabajo es abarcable".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión