Tres ovejas muertas en lo que parece otro ataque de lobo en el monte de Tardienta
Sería el tercero en tan solo diez días que se produce en esta zona de Los Monegros.
Tres ovejas más han aparecido muertas este sábado en el monte de Tardienta. A falta de conocerse el resultado de las necropsias, todo hace pensar en un nuevo ataque de lobo. De confirmarse, sería el tercero que se produce en esta zona en un periodo de tan solo diez días.
El primero se produjo el pasado 27 de marzo y fue el más letal, al dejar un balance de diez ejemples muertos (tres cabras y siete ovejas) y seis heridos. El ganado pertenecía al pastor Pedro Pérez. El segundo, que tuvo lugar el pasado martes, se saldó con una única oveja muerta, que formaba parte del rebaño de otro ganadero de Tardienta, Agustín Martínez, el mismo que ha sido objeto de este tercer ataque.
Los tres han tenido lugar en la misma zona de monte, que linda con Leciñena. Hasta ahora, este último municipio era el que concentraba un mayor número de ataques del lobo detectado hace ya casi dos años en la comarca de Los Monegros.
El nuevo ataque es muy similar a los dos anteriores. De hecho, el rebaño afectado, que constaba de unos 550 ejemplares, estaba situado dentro de un pastor eléctrico y las ovejas muertas han aparecido en su interior. Las tres presentaban heridas en el cuello y además, habían sido devoradas de forma parcial, según ha detallado el ganadero afectado.
De las tres ovejas, el cadáver de una de ellas ha sido conducido al centro de recuperación de La Alfranca (Zaragoza), donde será analizado con el fin de establecer qué tipo de animal ha sido el autor del ataque.
El pastor afectado insiste en que la presencia del lobo supone una «grave amenaza» para la ganadería extensiva y ante ello, urge una solución «a los únicos que pueden hacer algo: los responsables de la administración».
Tras este segundo ataque consecutivo, Martínez señala que ha recibido la llamada de varios responsables de la DGA, que le han ofrecido nuevos tipos de vallados con el fin de proteger su ganado y disuadir al lobo.
Desde el departamento aragonés de Desarrollo Rural, recuerdan que las ayudas puestas en marcha por el Gobierno de Aragón no solo se limitan a pagar al ganadero por las ovejas muertas sino que ahora la DGA asume el perjuicio que la mera presencia del lobo y el oso generan en determinadas zonas y en consecuencia, los profesionales del sector pueden acogerse a ellas hayan sufrido o no un ataque.
En una primera convocatoria, el Ejecutivo aragonés habilitó medio millón de euros. La convocatoria fue bien recibida por el sector ganadero y se acogieron la mayoría de profesionales que podían hacerlo. En total, fueron 81 los beneficiados, que recibieron una media de 5.500 euros. Ahora mismo, la DGA ya está trabajando en la segunda convocatoria.
El ganadero afectado de Tardienta, junto a otros profesionales de la zona, decidió no solicitar estas ayudas ni aplicar las medidas de seguridad recomendadas desde la DGA. No obstante, reconoció que está sopesando acogerse a la siguiente convocatoria y además, tiene claro que aceptará el ofrecimiento sobre el nuevo vallado, que, de cumplirse lo previsto, recibirá este mismo lunes.
Los principales sindicatos agrarios han señalado una y otra vez que las ayudas habilitadas resultan insuficientes y no sirven para solucionar el problema.
Por otra parte, el Gobierno de Aragón subvenciona dos proyectos de geolocalización del ganado, uno por radiofrecuencia en la Sierra de Guara y otro mediante vuelo de drones en Benasque, que pueden ser extrapolados a otros lugares que tomen la iniciativa en un proyecto similar. De hecho ya hay ganaderos de la zona que motu proprio tienen geolocalizadas sus ovejas.
