Renfe garantiza de nuevo que los futuros trenes de bajo coste de la línea del AVE que unan Madrid y Barcelona tendrán parada en Zaragoza. Este es el compromiso que ha adquirido este lunes el máximo responsable de la compañía, Isaías Táboas, con el presidente aragonés, Javier Lambán, solo unas horas después de que la operadora afirmara a este diario que no estaba decidido si los convoyes iban a parar en la estación de Delicias o pasarían de largo.

Fuentes oficiales de la DGA han señalado que Lambán ha llamado a Táboas y éste le ha asegurado que los denominados trenes EVA prestarán servicio en Zaragoza porque la ciudad es "clave" para el proyecto. En este sentido, han añadido que pretenden captar nuevos clientes al ferrocarril, para lo que es "estratégico" que los convoyes cubran la cuarta ciudad en pasajeros de la red de alta velocidad española. De hecho, el objetivo es sacar viajeros de la carretera y la capital aragonesa es un nudo de comunicaciones en el que se puede aumentar los transbordos entre modos de transporte.

De esta forma, los socialistas retoman el compromiso del Gobierno del PP, que hace un año dijo que el AVE de bajo coste prestaría servicio en Zaragoza tras reconocer en su lanzamiento que no estaba decidido en qué ciudades intermedias iba a parar, incluyendo igualmente a las de Calatayud y Lérida. Entonces, el exministro de Fomento Íñigo de la Serna apuntó que tras las pruebas, cuyo inicio anunció para este mes de febrero e incluía parada en Camp de Tarragona, se determinaría "como toda la vida" dónde estacionarían los trenes.

Calatayud se queda en el aire

La presión política y de la sociedad civil llevó al propio expresidente Mariano Rajoy a dar por hecho que Zaragoza contaría con los trenes de bajo coste, aunque su ministro no lo hizo extensible a Calatayud. Lo mismo pasa ahora con el Gobierno socialista, aunque el ahora ministro de Fomento, José Luis Ábalos, se comprometiera hace ahora un año en un acto de partido en la capital a apoyar la reclamación aragonesa de que el EVA parara en las dos ciudades.

Los que no se han olvidado de reclamar que el AVE de bajo coste pare también en la estación de Calatayud son los partidos aragoneses, que este lunes han lamentado que un servicio que debería ponerse en marcha en cuestión de días se vaya a demorar y solo haya la certeza, según Renfe, de que esté listo antes de diciembre de 2020, en coincidencia con la liberalización ferroviaria.

Aunque el consejo de administración de la compañía apruebe hoy su plan estratégico 2019-2023, en el que incluye el servicio de bajo coste para el AVE, aún tardará "meses" en redefinir un producto pensado para adelantarse a la futura competencia. En este sentido, la cúpula socialista de Renfe reprochó la semana pasada a sus predecesores del PP que los plazos anunciados hace un año "no respondían a la realidad" y argumentó que necesitará más tiempo para "fijar plazos realistas para la puesta en marcha y el comienzo de las operaciones". Por tanto, se desconoce si se mantendrá la pretensión inicial de ofertar cinco trenes por sentido y día con una rebaja del 25% en el precio.

Críticas en Aragón

Las críticas no se hicieron esperar. El presidente del PP-Zaragoza, el diputado autonómico Javier Campoy, ha lamentado que el PSOE funcione "a golpe de ocurrencia" y solo acierte "cuando rectifica". "Es una auténtica vergüenza que solo digan que retoman el proyecto que dejó el PP, que lo retrasen y encima no garanticen que pare en Zaragoza y en Calatayud", ha dicho antes de recordar la iniciativa que ha registrado en las Cortes para exigir que paren los trenes en Aragón.

Campoy ha acusado al PSOE de no haber hecho "nada" para implantar el EVA desde la moción de censura de junio de 2018 y se ha preguntado quién vela en la DGA por los intereses de Aragón.

El portavoz del PSOE, Javier Sada, ha sostenido que "nunca" mirarán hacia otro lado "como el PP" y exigirán que los trenes paren tanto en Zaragoza como en Calatayud. Sobre la demora, la ha achacado al PP por anunciar un servicio "y no mover ni un papel".

El diputado de Podemos Raúl Gay ha apuntado que han registrado una pregunta al consejero de Vertebración, José Luis Soro, para que aclare la próxima semana en el pleno qué hace la DGA para asegurar que los trenes paren tanto en Zaragoza como en Calatayud, tal y como reclamaron las Cortes hace un año. "Parece el día de la marmota y la conclusión es que Aragón les da igual a los gobiernos del PP y del PSOE", ha censurado.

Tampoco se ha quedado cortó el líder del PAR, Arturo Aliaga, quien ha insistido en que preguntarán al ministro Ábalos en el Senado por un tema que considera crucial en una autonomía despoblada. "Aragón no puede consentir que los trenes pasen de largo por Calatayud porque las paradas son necesarias para los intereses económicos y turísticos", ha reivindicado.

El parlamentario de Ciudadanos Jesús Sansó, ha exigido a la DGA y a Fomento que no continúen "con la improvisación" y aborden el proyecto con seriedad, incluyendo "parada en las estaciones aragonesas".

Por su parte, el portavoz de CHA, Gregorio Briz, ha considerado "lamentable" que no se garantice la parada bilbilitana y Aragón carezca de "las mismas oportunidades que otros territorios". En la misma línea se pronunció el coordinador de IU-Aragón, Álvaro Sanz, quien ha recriminado que el EVA se plantee como un "negocio puro y duro" sin tener en cuenta la vertebración de Aragón.