Aragón consume un millón y medio de piezas de caza menor al año

Las especies más consumidas son el conejo, la liebre, la perdiz y la codorniz.

Receta elaborada con carne de ciervo.
Aragón revaloriza el mercado de la carne de caza
HA

El consumo de carne silvestre procedente de la caza menor está en alza, y Aragón es una de las comunidades autónomas donde más se estila este producto. De hecho, según los últimos datos que publica el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, anualmente se capturan alrededor de un millón y medio de piezas que terminan en el plato.

Las especies más consumidas son, por este orden, el conejo, la liebre (mamíferos), la perdiz y la codorniz (aves), con precios que no superan los cuatro euros por unidad, muy lejos de los 82 que cuesta el ciervo o los 25 del corzo. Y es que una de las ventajas de la caza menor respecto a la mayor está en el importe de las piezas. Además, posee un elevado valor nutricional.

“La carne silvestre reúne características que la hacen única. Tiene un sabor atractivo y es muy sana”, explican fuentes de la Asociación Interprofesional de la Carne de Caza, ensalzando su “alto contenido” en proteínas, hierro, fósforo, magnesio y potasio.

“Su origen natural hace que su calidad organoléptica sea singular, puesto que por su alimentación y modo de vida, cada pieza es distinta”, añaden las mismas fuentes, antes de asegurar que la industria española, gracias a los avances de los últimos años, está “a la vanguardia de Europa”.

Al contrario de lo que ocurre con la caza mayor, la totalidad de las capturas de caza menor se consumen dentro del país. De ahí que los recetarios de toda la geografía nacional incluyan guisos de conejo, liebre, perdiz o codorniz, tanto en sus versiones clásicas como en otras más modernas.

“Uno de cada cuatro españoles declara consumir carne silvestre al menos una vez al año. La caza es una actividad fundamental para el desarrollo, la sostenibilidad y el potencial crecimiento de la economía rural en nuestro país. Frena el éxodo rural y contribuye a fijar la población en zonas desfavorecidas”, valoran desde la Asociación Interprofesional de la Carne de Caza, antes de destacar que el perfil del consumidor de carne silvestre es el de “un varón de entre 35 y 45 años con un nivel socioeconómico medio y alto”.

“La principal forma de acceso a este tipo de carne es directamente de la actividad cinegética, ya sea propia o de familiares o amigos (56,8%), seguido del canal restauración (38,2%)”, concluyen.

20 millones en España

Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en España se capturan 21,3 millones de piezas de carne silvestre de caza menor, sumando un peso total de 15,8 millones de kilos y un valor de 42,6 millones de euros.

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