La Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón (UAGA) se reunió este jueves en el edificio Pignatelli con el presidente autonómico, Javier Lambán, y el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Joaquín Olona. Era un encuentro muy esperado por los miembros de la organización agraria. Además de trasladar al Ejecutivo cuestiones que consideran vitales para el campo aragonés, como la gestión de las ayudas o la política hidraúlica, querían tratar personalmente con Lambán la que es la mayor preocupación de UAGA desde el 14 de diciembre de 2017: los asesinatos del ganadero José Luis Iranzo y de los guardias civiles Víctor Jesús Caballero y Víctor Pérez, perpetrados por el pistolero Norbert Feher en Andorra.

Junto al presidente de Aragón y al consejero de Agricultura, en la mesa de trabajo se sentaron varios miembros de la junta de UAGA encabezados por su secretario general, José María Alcubierre, y Eva Febrero, la viuda del ganadero asesinado. Según explicó Febrero a la prensa tras el encuentro, conocer qué sucedió en los diez días que mediaron entre el tiroteo de Albalate del Arzobispo –en el que resultaron heridos de gravedad el jubilado Manuel Andreu y el cerrajero Manuel Marcuello– y el día del triple crimen es vital, no solo para ella y los compañeros de sindicato de su marido, en el que trabajó durante más de dos décadas, sino para toda la comarca bajoaragonesa.

"El presidente nos ha dicho que va a hacer todo lo posible para analizar lo que pasó", indicó Eva Febrero. Este compromiso incluye una reunión con la delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, a la que también asistirá Lambán. En este encuentro, Febrero podrá trasladar todas las cuestiones que considere sobre el operativo que se desplegó, según le manifestó el presidente, así como los datos que se tenían de la presencia de Feher en España.

Para la viuda de Iranzo, "es evidente" que hubo fallos en el operativo. "Creemos que saber qué pasó durante esos días tendrá que cambiar los protocolos", añadió Alcubierre, quien aseveró que el presidente de Aragón, "como el primero de los aragoneses", "debe coger la bandera de la seguridad en el medio rural".

"Con claridad y transparencia indudablemente mejorarán las cosas", dijo Eva Febrero, que desde que se cometió el triple crimen, hace más de un año, se ha reunido con diferentes instituciones públicas, entre ellas la subdelegación del Gobierno en Teruel y el Justicia de Aragón, y sigue buscando respuestas.