El municipio zaragozano de La Almunia de Doña Godina inaugurará este domingo, 13 de enero, una nueva señalética de su judería, que se va a instalar estos días tras un trabajo de documentación de dos años. Además, habrá una visita guiada por la misma, que será dirigida por el historiador Julián Millán y que contará con actuaciones teatralizadas y música.

El diputado delegado de Turismo de la Diputación de Zaragoza, Bizén Fuster, el concejal de Turismo de La Almunia, José Manuel Latorre, y el historiador Julián Millán han informado en rueda de prensa de este proyecto, que ha contado con un presupuesto de 7.000 euros.

La judería podrá ser visitada a partir de ahora de forma libre por los turistas que lo deseen y cuando se inauguren próximamente la Oficina de Turismo también se podrán solicitar visitadas guiadas por la misma.

El concejal de Turismo de La Almunia, José Manuel Latorre, ha explicado que se va a contar con seis paneles informativos ubicados en las que fueron las principales entradas a la judería, así como en la plaza principal, donde estaba la sinagoga, y en determinados rincones con encanto, paneles en los que, entre otras cosas, se recrea como era una casa judía y aparece un plano del barrio.

Además, se va a marcar el perímetro de la judería con unos pequeños cuadrados de cerámica de Muel donde aparece la estrella de David y la palabra judería. Latorre ha señalado que este proyecto "es una propuesta de carácter turístico" que también pretende "devolver valor a una zona del casco histórico que está olvidada porque desconocemos su importancia".

El concejal de Turismo ha subrayado que los paneles sintetizan y divulgan el trabajo de estudio de la documentación existente sobre la judería realizado durante dos años por el historiador Julián Millán y que ha permitido descubrir el trazado principal de la judería, que estaba ubicada entre las calles Cantarranas, Barrioverde, de la Balsa, del Rosario, Barriocurto y Adobares.

Oferta turística

Latorre ha comentado que este proyecto se suma a anteriores actuaciones en las que se ha investigado y dado a conocer a personas y lugares de la localidad. Según ha dicho, esta labor permite dar una oferta de turismo, patrimonio y cultura al visitante.

Al respecto, el diputado delegado de Turismo de la DPZ, Bizén Fuster, ha resaltado el trabajo que está desarrollando La Almunia de Doña Godina que le está convirtiendo en una de las localidades "más preparadas para el turismo" en la provincia.

Según ha apuntado, ha incorporado en los últimos años proyectos, rutas y actividades culturales que la hacen atractiva. En este caso, ha remarcado que la judería pasa a ser un elemento más de visita al municipio y se incorpora a la red de las que ya lo son en toda la provincia.

Desde el principio

El historiador Julián Millán ha explicado que desde la fundación de La Almunia de Doña Godina en el año 1178 hay constancia de apellidos relacionados con los judíos.

Según ha detallado, la judería llegó a tener unos 200 habitantes y uno de sus momentos de crecimiento fue el año 1391, cuando fueron asaltadas juderías importantes, como la de Barcelona y Valencia, que llevó a algunas familias a trasladarse a vivir al ámbito rural, acogiendo la de La Almunia a algunas de ellas.

Millán ha resaltado que lo que se conserva de la judería es su urbanismo ya que la gran inundación que afectó a la localidad en 1731 destruyó gran parte de las viviendas, si bien se construyó sobre lo que ya había y se conservan algunos de los basamentos.

El historiador ha precisado que las casas judías no se diferenciaban de las cristianas, salvo por la 'mezuzah', una caja que se encontraba en la parte derecha de los pórticos de las viviendas que contenía un pergamino con dos versículos de la Torá y que los habitantes tocaban al entrar o al salir a modo de bendición.

Asimismo, ha relatado que la estructura organizativa "estaba bien establecida desde el principio", contando con una sinagoga desde el primer momento, que era el centro administrativo fundamental, y una cofradía asistencial para atender a viudas, facilitar dotes a jóvenes huérfanas o asegurar entierros dignos, ha expuesto el historiador. También había un hospital.

El especialista ha contado que la judería pagaba sus impuestos directamente al rey, mientras que la parte cristina de la localidad funciona a través de un concejo que dependía de la Orden de San Juan de Jerusalén, que es quien entregan sus tributos.

Profesiones

Julián Millán ha manifestado que los judíos de La Almunia eran médicos y artesanos, con trabajos como tejedores, zapateros, carpinteros o zapateros, y, además, daban crédito al por menor. Todas las transacciones económicas de los judíos están documentadas y además de a particulares también prestaron dinero a ayuntamientos cercanos.

También tenía importancia la carnicería, que aseguraba que la carne que se sacrificaba según sus costumbres y que el animal estaba sano, para lo que la sinagoga contaba con un funcionario, algo que hizo que "la calidad alimentaria de los judíos fuera superior" al resto de habitantes.

Por otra parte, compartían algunos elementos con el resto de municipio, como los hornos de pan, el molino de aceite o los herreros.

El momento de la expulsión de los judíos en 1492 también está documentado, en el que salieron 65 hombres, 19 mujeres y 14 jóvenes de la localidad. Hubo previamente una conversión de muchos de ellos, que pasaron a formar parte de la elite de la localidad, como ocurrió en otras ciudades en ese momento.

Divulgación

Martín ha indicado que se conserva "mucha documentación" sobre esta judería y el objetivo de este proyecto ha sido divulgarla "para que llegue al gran público", se pueda conocer el pasado y disfrutar con la visita a este espacio.

La inauguración de la señalética de la judería de La Almunia tendrá lugar este domingo, a las 11.30. La comitiva saldrá desde la plaza de España, para dirigirse a este espacio, donde tendrá lugar el acto institucional y después habrá un paseo guiado por el el historiador Julio Millán.

Es una actividad gratuita que también incluirá teatro y música a cargo de la compañía Zoótropo y del músico Miguel Ángel Fraile, respectivamente.