Los termómetros seguirán congelados y no se espera nieve en la montaña hasta la próxima semana

Zaragoza y Huesca amanecieron este viernes cubiertas de un manto blanco provocado por la niebla gelante o cencellada. La prealerta por bajas temperaturas se mantiene hoy en la Ibérica zaragozana.

Zaragoza amaneció el viernes cubierta por un manto blanco provocado por la cencellada, como refleja esta foto tomada en el Actur a las 8.30.
Zaragoza amaneció el viernes cubierta por un manto blanco provocado por la cencellada, como refleja esta foto tomada en el Actur a las 8.30.
José Miguel Marco

Los Reyes Magos llegan con más frío a Aragón y la vuelta al cole, la próxima semana, se hará con nieve en el Pirineo. Así se pueden resumir las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Los termómetros amanecieron este viernes congelados en las tres provincias de la Comunidad y el fenómeno de la niebla engelante o la cencellada, que se produce cuando la niebla coincide con temperaturas bajo cero, dejó a primeras horas de la mañana las calles de pueblos y ciudades cubiertas por un manto blanco.

Mientras, la inversión térmica, menos acentuada que el miércoles, provocó que de madrugada en Benasque se alcanzaran los 9 grados positivos, mientras en la capital oscense se registraban 6 bajo cero y en Zaragoza capital hasta 4 bajo cero. Por esta razón, las temperaturas más cálidas a lo largo del día se registraron al mediodía y primeras horas de la tarde en pleno Pirineo; 14,9 grados en Torla; 14,5 en Tarazona; 14,4 en Bielsa y 13,8 en Aragüés del Puerto. La localidad turolense de Bello volvió a marcar el registro más gélido de la Comunidad, 8,8 grados bajo cero, seguida muy cerca por Leciñena y Santa Eulalia del Campo con 8,5 grados bajo cero.

Las imágenes de la cencellada, que en aragonés se conoce también como dorondón o farineta, se repetirán hoy. Está previsto que a primera hora de la mañana se mantengan los bancos de niebla en el centro y sur de Huesca y en la zona oriental de la ribera del Ebro.

Además, habrá heladas generalizadas. De hecho, la Agencia Estatal de Meteorología mantiene hoy la prealerta por temperaturas mínimas en la Ibérica zaragozana hasta las 10.00. Zaragoza es una de las 14 provincias españolas que tiene un aviso por temperaturas gélidas que podrán alcanzar los seis grados bajo cero.

No hay que confundir la cencellada, en la que las gotas minúsculas de una densa niebla se congenlan, con la escarcha o rosada, que tiene lugar cuando el rocío nocturno se congela por las bajas temperaturas.

El delegado territorial de Aemet en Aragón, Rafael Requena, explicó que la niebla matinal en la capital aragonesa, de unos 400 metros de espesor vertical, no era «tan extensa como en otras veces, cuando se forma un mar de nubes y resulta mucho más persistente». De hecho, sobre las 13.00 el sol hizo su apareció y el día se despejó. «En cuanto sopla un poco de cierzo, la niebla se levanta y las temperaturas mejoran», apuntó.

¿Y cuándo nevará? Para responder a esta cuestión tan recurrente en unas fiestas navideñas muy poco blancas, Requena explicó que la mitad norte de España está en medio de un anticiclón instalado en las islas británicas que impide la entrada de frentes de precipitaciones y de frío y que persistirá hasta el martes. «La situación se va a mantener igual durante el puente de Reyes», dijo.

Sí avanzó que para el miércoles o jueves de la semana que viene se prevén posibles nevadas en el Pirineo gracias a la visita de una masa de aire muy frío. Las expectativas son más esperanzadoras de cara al fin de semana del 12 y 13 de enero aunque, según Requena, «todavía es muy pronto para hacer una predicción muy certera».

Atención a personas sin hogar

El intenso frío de estos días también obliga a reforzar los protocolos y dispositivos para tender a las personas que duermen en las calles. Es el caso de Cruz Roja Zaragoza, que este puente moviliza a los equipos de voluntarios de la Unidad de Emergencia Social para que de 20.00 a 00.00 recorran la ciudad y ofrezcan mantas, ropa de abrigo, alimentos, bebidas calientes y conversación a personas que pernoctan a la intemperie. Este servicio se lleva a cabo entre semana, pero se ha decidido prestar de forma ininterrumpida hasta que cese la alerta por bajas temperaturas.

El pasado fin de semana y el día de Año Nuevo también fue necesario activar a estos voluntarios que atendieron a 24 personas, 20 hombres y cuatro mujeres.

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