El almacén central de distribución de material sanitario que el Salud tiene en la Plataforma Logística de Zaragoza (Plaza) entrará al fin en funcionamiento a mediados de enero. Y para lograrlo ha tenido que salvar un último impedimento, el cierre presupuestario que imposibilitaba no solo dar cobertura al alquiler de las instalaciones de la sociedad pública Plaza para los próximos cuatro años sino la compra centralizada de los suministros por un importe de 17,8 millones de euros.

El consejero de Hacienda, Fernando Hacienda, ha decidido excepcionar los expedientes porque era consciente de que su paralización "podría afectar al funcionamiento ordinario del Servicio Aragonés de Salud". De hecho, el Departamento de Sanidad pidió saltarse el cierre contable porque la sociedad pública Plaza ya había empezado a emitir facturas por la nave en octubre, el contrato se alarga hasta septiembre de 2022 y carecía de respaldo presupuestario para afrontar el arrendamiento. Por ello, Gimeno ha aceptado su tramitación anticipada.

Al mismo tiempo, Hacienda ha autorizado la misma tramitación para la adquisición centralizada del material que se almacenará en Plaza para su distribución por los centros sanitarios de la Comunidad. Se trata de cinco expedientes por un importe global de 17,8 millones para la compra de equipos de infusión, suturas mecánicas, catéteres intravasculares, tiras reactivas y bragapañales para adultos y empapadores. Todos ellos disponen del correspondiente respaldo de partidas presupuestarias en 2018.

La pretensión es poner en marcha las instalaciones el próximo 14 de enero con el suministro al sector sanitario II de Zaragoza, que se irá ampliando progresivamente para cubrir todo Aragón a principios de la primavera de 2020. En el primer semestre de 2019 centralizará los suministros de los sectores I y II de Zaragoza, además del 061. Entre julio y octubre asumirá el último sector de la capital y Calatayud y entre finales de 2019 y enero de 2020 se llegará a Huesca y Barbastro. Por último, se atenderá entre febrero y abril de 2020 a Teruel y Alcañiz.

El Salud asegura que su puesta en marcha permitirá ahorrar 2,1 millones por la gestión y compra centralizada del material sanitario para toda la Comunidad. De su funcionamiento se encargará una empresa especializada en logística, para lo que se sacó a concurso el pasado verano por 2,8 millones.

El almacén central del Salud ha sufrido múltiples vicisitudes que han demorado su apertura pese a estar listo desde 2015. La Gerencia de Urbanismo dio el visto bueno definitivo a las instalaciones a principios de año una vez se contrataron las adaptaciones exigidas para corregir las deficiencias en materia de seguridad, que alargaron las obras hasta el pasado verano. Su superficie alcanza los 5.000 metros cuadrados y en su acondicionamiento se han invertido 2,4 millones.

Más expedientes

Estos no son los únicos expedientes que han tenido que salvar el cierre contable para garantizar obras, suministros, servicios y ayudas comprometidas este año por las consejerías de Salud, Educación e Innovación, Investigación y Universidad. En el paquete se incluyen las obras de los centros de salud de Valderrobres, Barbastro, la ampliación del de Binéfar y el nuevo bloque quirúrgico del hospital de Calatayud, el servicio de información de cuidados de enfermería, el suministro de radiofármacos y el servicio de oxigenoterapia a domicilio. Solo los expedientes de Sanidad suman más de 38 millones.

Ante la posible prórroga presupuestaria, Innovación ha logrado el permiso para incrementar en 292.934 euros la partida de complementos de méritos del personal docente e investigador de la Universidad de Zaragoza, ya que de otro modo no podría abonarlos en 2019. Y ha ajustado el calendario de pagos de la reforma de Filosofía y Letras para adaptarse al nuevo plan de trabajo. Esto supone reducir la partida de este año de 1,9 millones a tan solo 223.918 euros y rebajar a 6,5 millones la de 2019, que supone otro recorte de 371.874 euros. El grueso de los pagos se harán en la próxima legislatura: 7,7 millones en 2019 y otros 9,5 en 2020.

Hacienda también ha excepcionado siete expedientes de Educación para pagar las ayudas de transporte y comedor del curso pasado en la educación especial (1 millón) y las destinadas a la compra de libros para este curso (3,5 millones). Igualmente, la Consejería ha podido abonar un trimestre pendiente del servicio de comedor (754.869 euros), el transporte escolar del inicio del curso (2,2 millones), el arrendamiento de aulas prefabricadas en Zaragoza y Huesca (278.091 euros), modificar el contrato del centro de educación especial Jean Piaget para ampliar su cobertura (26.162) y afrontar las adendas a los convenios con los ayuntamientos para garantizar la educación infantil de primer ciclo (26.033).