La estación de Astún se encuentra ubicada en un enclave privilegiado que, además de dotarla de una enorme belleza, le proporciona numerosos beneficios para la práctica del esquí. Todas sus laderas están dotadas de hierba natural, lo que hace que la nieve cuaje y se mantenga más fácilmente, algo muy deseable especialmente al inicio de la temporada. Asimismo, al situarse en un valle transversal al eje pirenaico, su orientación la protege de las corrientes de viento, evitando el desplazamiento de la nieve y ofreciendo un entorno más seguro para los esquiadores.

Cuenta con pistas de todos los niveles de dificultad; desde las verdes, perfectas para principiantes, hasta las pistas negras, destinadas a que los esquiadores más expertos puedan superarse día a día. Un total de 51 pistas (5 verdes, 18 azules, 22 rojas y 6 negras) conforman la estación. Cabe resaltar que todos los descensos confluyen en una gran plataforma, el núcleo de la estación, de manera que los grupos de visitantes pueden disfrutar de la nieve con total tranquilidad aunque su destreza sea diferente. Un total de 10 itinerarios, un ‘snowpark’, una zona de trineos y un estadio de competición completan la oferta de nieve. Para el transporte de los pasajeros disponen de 15 remontes: 2 telesillas cuadriplaza desembragables, 2 telesillas cuadriplaza fijos, 1 telesilla biplaza fijo, 7 telesquís y 3 cintas; que suman una capacidad de 20.000 esquiadores por hora.

Asimismo, existen diversos servicios de hostelería y restauración para el disfrute de esquiadores y visitantes. Hoteles, apartamentos, cafeterías, ‘self-service’, ‘snack-bar’ con terraza, tiendas de alquiler de material, guardería, etc.

La semilla que dio origen a la generación de Astún data de 1970, con unos primeros estudios de comprobación de la idoneidad del territorio para instalar una estación de esquí. El enorme trabajo de los ingenieros que realizaron el proyecto y el apoyo del Ayuntamiento de Jaca suscitaron el interés del entonces ministro de Turismo, que visitó la zona y la declaró Centro de Interés Turístico Nacional. Cinco años después comenzó la construcción de la carretera pública de acceso a la que sería la zona urbana de la estación. Solo habría que esperar a diciembre del año siguiente para que se pusiera en marcha la instalación, que contaba para entonces con dos remontes, el telesilla biplaza de La Raca y el telesquí de Sarrios. Posteriormente, se fueron haciendo mejoras de las infraestructuras.

Se creó un aparcamiento, se cubrieron los barrancos en la zona baja de la estación para crear la explanada de recepción de los esquiadores, se abrió un restaurante en la cota 2.000 y se construyeron infraestructuras de las líneas subterráneas y dos centros de transformación para llevar la energía eléctrica a todo el valle. Desde entonces, el aumento de los servicios, la mejora de las pistas, el trazado de otras nuevas y las mejoras tecnológicas han sido constantes.

A lo largo de los años, Astún se ha convertido en una estación emblemática de referencia en nuestro país. Muestra de ello, el aumento sustancial de visitantes, que han pasado de 34.895 esquiadores en la temporada de 1976-1977 a más de 320.000 ahora.

Astún es ideal para disfrutar de la nieve con niños. Además de las pistas verdes, sencillas y asequibles para esquiadores principiantes, la estación cuenta con una zona de trineos y un jardín de nieve, dos espacios perfectos para los más pequeños de la casa.

El jardín de nieve está dividido en dos estancias principales. Por un lado, uan zona interior climatizada, donde los monitores invitan a los niños a realizar diversas actividades y juegos. Por otro, un recinto exterior, perfecto para que den sus primeros pasos en la nieve.

La zona de trineos, por su parte, es un espacio reservado únicamente para tal fin, de manera que quedan prohibido esquiar, convirtiendo este área en un lugar seguro para los descensos en trineo, que son suministrados por la propia estación al adquirir la pulsera que da acceso a este servicio.

Se trata de la elección perfecta para aquellos padres que deseen hacer una visita a la estación en familia, permitiendo que los adultos puedan deslizarse por las pistas mientras sus hijos disfrutan con otros niños jugando en la nieve.

Tanto para aquellos que quieran iniciarse en el maravilloso mundo del esquí o del ‘snowboard’ como los que deseen mejorar su técnica, podrán hacerlo en la Escuela Oficial de Esquí de Astún (EOEA).

La estación cuenta con cursillos semanales, clases particulares y clases colectivas dirigidos a adultos y niños de todos los niveles.

De lunes a viernes, esta escuela oferta cursos de esquí y ‘snowboard’ de un total de 10 horas de duración para adultos y niños a partir de 6 años. El precio es de 237,75 € para adultos y 209,25€ para niños hasta 11 años y mayores de 65.

Las clases particulares pueden ser de 1 o 2 horas y el precio varía según la cantidad de alumnos (de 1 a 5) y los horarios.

Las clases colectivas, de dos horas de duración, están dirigidas a grupos de entre 6 y 10 alumnos, que se seleccionan según el nivel de los mismos. Se realizan también cursos especiales de fin de semana, en los que se ofrecen 4 horas de clase (2 horas el sábado y 2 el domingo) y se realizan en grupos de un máximo de 10 alumnos del mismo nivel.

En Navidad y Año Nuevo se realizarán dos cursos especiales que se prolongan del 26 al 30 de diciembre de 2018 y del 2 al 6 de enero de 2019, respectivamente. Para más información y reserva de las clases se puede contactar directamente con la escuela a través del correo escuelaesqui@astun.com.

‘Snowpark’

El ‘snowpark’ es uno de los grandes atractivos de la estación. La zona central está reservada para el ‘jibbing’ de niveles principiante y medio. En la zona de la derecha se encuentran dos saltos, con un plano de entre 6 a 12 metros dependiendo de las nevadas. A la izquierda se ha dispuesto también otro salto, de entre 4 y 6 metros y un pequeño medio tubo con formas suaves para realizar transiciones.

Nueva ‘app’

La ‘app’ oficial de Astún ofrece toda la información relevante sobre la estación, las previsiones metereológicas y el parte de nieve en tiempo real. Gracias a esta aplicación, los usuarios podrán consultar el mapa de pistas y conocer de primera mano el estado de apertura de pistas y remontes. Asimismo, podrán registrar los kilómetros que recorren cada día con el ‘tracker’ GPS, ver sus estadísticas, buscarse en los ránquines, localizar a sus amigos y participar en los retos que plantea la estación a lo largo de la temporada. La aplicación, que puede descargarse en los principales buscadores, es completamente gratuita.

Conducción en nieve

A 2.000 metros de altura: el ‘Snow Driving’ es una de las actividades con mayor atractivo de la estación. A 2.000 metros de altitud, en pleno corazón de Astún, Ford ofrece un curso de conducción sobre nieve y hielo. Sistema de tracción inteligente: los participantes tendrán la oportunidad de probar toda la gama AWD de Ford, un sistema de tracción inteligente 4x4 que analiza las condiciones de conducción, el agarre y el equilibrio para dar la capacidad de respuesta necesaria adaptada al terreno. Aprendizaje: tras una introducción teórica, los alumnos podrán aprender a conducir con seguridad en terreno nevado acompañados por un monitor especializado que les mostrará cómo hacer ‘slaloms’, derrapes controlados en curva, frenadas y esquivar obstáculos. Esta parte práctica, que sirve como complemento perfecto a esos conocimientos antes adquiridos, tendrá una duración de 30 minutos. Abierta a todos los públicos: esta actividad está disponible para cualquier persona con carné de conducir que quiera vivir una experiencia emocionante. Inscripciones: para participar hay que inscribirse en la web de Ford.Comer y beber en pistas

La estación de Astún ofrece diversas opciones hosteleras, tanto en el núcleo base como en distintos puntos del dominio esquiable.

Henry Arbelé Lounge: a 2.000 metros de altura, situado a mitad del descenso de La Raca, se encuentra este moderno y singular espacio. Su carta está compuesta por pequeños bocados y bocadillos ‘premium’, perfectos para acompañar con alguno de sus vinos, cavas o champanes. Terraza Ibones: este lugar ofrece unas de las mejores vistas panorámicas de la estación. Junto a la llegada del Telesilla Truchas, los esquiadores podrán descansar tomando un aperitivo o un plato de pasta acompañado de un buen cava. Terraza Sarrios: esta cafetería está situada frente a la pista de ‘snowpark’ y su oferta gastronómica se centra en bocadillos tradicionales. Asimismo, dispone de una barbacoa en la zona de ‘solarium’. Terraza Midi: en la planta baja del Hotel Europa, este establecimiento ofrece cocina de alta calidad a buen precio. La Moleta: gracias a su fácil accesibilidad es perfecto tanto para los esquiadores como para aquellos visitantes que se hayan acercado a disfrutar de un día de nieve en familia.‘Après ski’

Visitas a Jaca: este bello municipio oscense se encuentra a tan solo 30 kilómetros de distancia de la estación de Astún, lo que la convierte en una de las visitas predilectas de los esquiadores. Su catedral, la Ciudadela o el Monasterio de San Juan de la Peña son solo algunos de los atractivos turísticos que ofrece la zona. Otras actividades deportivas: además del esquí y el ‘snowboard’, en Jaca y sus alrededores se encuentran numerosas instalaciones para practicar deportes como el patinaje sobre hielo, el descenso de cañones, la escalada, el senderismo o la pesca deportiva.Abonos

Datos de interés

Teléfono: 974 373 088 Web: www.astun.com Km esquiables: 50. Pistas: 51 (5 verdes; 18 azules; 22 rojas; 6 negras) y 10 itinerarios. Remontes: 15 (5 telesillas, 7 telesquís y 3 cintas). Esquiadores/hora: 20.000 Cotas: 1.660-2.300 m. Horarios: de 8.45 a 17.00.