Pere Navarro, el director general de la DGT, ha cumplido cuatro meses en el puesto. La segunda etapa de Navarro al frente del organismo que controla la seguridad vial en España aún es breve como para hacer balance, pero las líneas de trabajo que ha anunciado en las últimas semanas le auguran un mandato intenso, y de muchos cambios para los conductores.

Uno de los frentes abiertos por los nuevos responsables de la DGT es la reforma del carné por puntos, puesto en marcha por el propio Navarro. El objetivo principal con el que hace más de 12 años nació el permiso de conducir por puntos era reducir el número de muertos y la siniestralidad en las carreteras españolas. A medio plazo se consiguió, pero en los últimos tiempos las estadísticas han empeorado sobre todo, mantienen desde la dirección general, por los excesos de velocidad y el uso de los móviles al volante.

Las estadísticas de infracciones son tan desalentadoras que indican que solo en los últimos dos años, cerca de 36.500 conductores españoles han perdido todos los puntos y, con ellos, la vigencia de su permiso de conducir. Así se desprende de los datos facilitados por el Gobierno central en una respuesta parlamentaria. En Aragón, el número de infractores que se han quedado sin carné se acerca al millar. De acuerdo con los datos oficiales, los zaragozanos lideran el cupo de infractores: prácticamente 8 de cada diez carnés retirados han sido a vecinos de Zaragoza.

Curso de reeducación vial

Si quieren volver a conducir, los aragoneses que se ha quedado sin puntos tendrán que apuntarse a un curso para volver a obtener el permiso y superar un examen. Según lo establecido en la ley, los que superen ambas pruebas, recuperarán la licencia de la que eran titulares con la misma antigüedad. Las materias de estas formaciones giran en torno a la sensibilización y la reeducación vial. De acuerdo con los datos facilitados por la propia DGT, el curso de recuperación del permiso de conducir cuesta actualmente 329,30 euros (impuestos excluidos) y el pago correrá a cargo del conductor que ha perdido los puntos, por supuesto.

A día de hoy, en Aragón hay una docena de autoescuelas que ofrecen estas formaciones de reciclaje, pero la oferta de cursos es cambiante según la época del año. La recuperación parcial de los puntos es algo más asequible (174,93 euros con los impuestos aparte) y el catálogo de centros de formación de seguridad vial que los imparten son más amplios.

Los hay que, para ahorrarse la formación, acuden al mercado negro de puntos. Esta picaresca ha disminuido en los últimos años, aunque se sigue detectando en algunas páginas de compraventa por internet. “Se venden bolis y con cada uno se regala un punto de carné. Precio por boli 150 euros”, reza un anuncio que se puede leer en uno de los portales de segunda mano más conocidos.

Próximos cambios en seguridad vial

La principal modificación del carné por puntos que quiere llevar a cabo Navarro tiene que ver con el que él considera el mayor problema de la seguridad vial en la actualidad: el móvil. La modificación por usar el teléfono al volante aumentará la retirada de puntos de los 3 puntos actuales a 4 o a 6. Lo más probable es que esta infracción se equipare a la conducción bajo los efectos del alcohol.

También es más que probable que se modifique el Reglamento de Circulación para unificar en 90 km/h el límite máximo de velocidad en las carreteras convencionales, tengan o no tengan arcén de 1,5 metros. Aunque de momento la medida se está tramitando, en algunos círculos especializados se ha barajado el 2 de enero como posible fecha de entrada en vigor de esta medida.