Una radio llena el Patio
La mañana del domingo no invitaba a salir de casa en Zaragoza con este bajón térmico, que nos ha llevado del otoño veraniego al otoño invernal en cuatro días, salvo que tuvieras alguna cita en el Patio de la Infanta para escuchar en directo el programa No es un día cualquiera de Radio Nacional. Los conocí en Canfranc el pasado mes de agosto, cuando nos emocionamos cantando Somos de Labordeta en el vestíbulo de la estación, y el domingo pude disfrutar de su gran directora Pepa Fernández y un equipo maravilloso que la acompaña. La radio había llenado el Patio de la Infanta y los más de 250 asistentes o escuchantes la gozaron.
Llegué a escuchar a mi colega Luis Grañena, un caricaturista único que nació profesionalmente en Heraldo de Aragón y está dando la vuelta al mundo desde Valderrobres, donde reside ahora con su familia. Era tan auténtico respondiendo como son sus dibujos en los que ha marcado estilo y ha sentado cátedra, con eso de que «hay que sintetizar el parecido». Pero casi le avergonzaba hablar de sus cuadros y casi levanto la mano para que hablara de uno suyo de un mendigo buscando en un contenedor que lo guardo como una joya.
El periodista Toño Fraguas, hijo de Forges, nos ayudó a entender el existencialismo; Juan Yereni habló con una escuchante llegada de madrugada desde Barcelona; Emilio del Río se vistió de jotero para explicar el origen de la jota aragonesa, y Pepa desgranó con José Luis Rodrigo, director general de la Fundación Ibercaja, y Domingo Buesa las exposiciones de Goya-Buñuel y «Pasión por Zaragoza. El reino de los sentidos». Un lujo.