La seguridad en la vía de salida en coche del campo de tiro de Monzón se va a ver reforzada con la reciente instalación de un quitamiedos. Se trata de una valla de madera de unos 170 metros de longitud, que se integra en el paisaje al mismo tiempo que evita riesgos a los conductores.

La barrera se ha colocado en el camino de bajada desde el cerro de Santa Quiteria, donde se encuentra el campo de tiro, hasta la explanada del cementerio municipal. Esta instalación, cuyo coste ha sido de 14.000 euros, viene a completar las mejoras que el Ayuntamiento ha llevado a cabo en esta zona en las últimas semanas.

Con una inversión económica similar, en agosto se asfaltó el camino y también se reordenó el sentido del tráfico. Así, la vía que hasta ese momento se empleaba para subir desde el cementerio hasta el collado, queda ahora reservada para la bajada de vehículos desde el club. Allí, se conecta con otro camino, que parte de la calle de la Balsa y que ahora es el acceso para subir.

De igual forma, el camino tradicional de subida al cerro de Santa Quiteria se emplea ahora para salir del campo de tiro y bajar hasta Monzón. Es en este tramo donde se ha colocado el quitamiedos de seguridad.

Las actuaciones vinieron motivadas, entre otras cosas, porque el camino de subida tenía poca anchura y el cruce de dos vehículos resultaba conflictivo.

Para evitar confusiones, en agosto también se instalaron señales verticales que indican claramente las direcciones prohibidas. “El quitamiedos, que era ineludible, ha completado la actuación”, explica Álvaro Burrel, alcalde de Monzón.

Dos meses después de las mejoras, desde el Ayuntamiento aseguran que los usuarios del club de tiro han valorado positivamente el cambio del sentido de circulación.