Ni en las bases del concurso de los colegios públicos aragoneses, ni en el convenio de aplicación de restauración colectiva hay ningún apartado que obligue a regular los horarios y el personal necesario para el servicio de cocina. Por ello, según aseguran desde CC. OO. Aragón, muchas trabajadoras y trabajadores de este sector trabajan de manera gratuita más horas de las contratadas y tienen verdaderos problemas para conciliar su vida personal y laboral.

Desde hace años, la Federación de Servicios de CC. OO. Aragón reclama que se incluyan ratios para mejorar la calidad del servicio y las condiciones laborales de los profesionales de cocina. Considera un enorme abuso que en algunos centros haya una sola persona realizando este servicio para unos 80 niños. Por ello, reclama al Gobierno de Aragón (pliegos de condiciones) y a la patronal del sector (convenio de restauración colectiva) que sienten las bases para que el personal de cocina pueda realizar su actividad en condiciones dignas.

El sindicato asegura que en el espacio del comedor escolar conviven las monitoras de comedor y el personal de cocina. Mientras las primeras están reguladas por los ratios contemplados en los pliegos, citados anteriormente; el personal de cocina carece de este derecho. Algo que perjudica notablemente la calidad de un servicio indispensable y por el que muchos padres y madres pagan un suplemento.

Para el sindicato, esta falta de regulación supone un abuso por las enormes cargas de trabajo que sufren y de horas extras no remuneradas y perjudica notablemente la conciliación de la vida personal y familiar.