La Cámara de Cuentas insta a revisar los objetivos de los proyectos a cargo del FITE

Los 934 millones invertidos desde 1993 no han permitido combatir la despoblación.

Aeropuerto de Caudé
Reunión del Consorcio del Aeropuerto de Caudé
Jorge Escudero

El Fondo de Inversiones de Teruel (FITE) ha contribuido a generar renta y riqueza en la provincia, pero no ha corregido los principales desequilibrios a los que se enfrenta, que son la despoblación y el encarecimiento en la prestación de los servicios públicos a una población cada vez más envejecida. Esta es la conclusión a la que llega la Cámara de Cuentas tras fiscalizar el FITE en 2016 y revisar los programas que se han financiado de 1993 a 2016 con una inversión de 848 millones de euros.

El órgano fiscalizador recuerda al Gobierno aragonés que estos proyectos, que debe cofinanciar al 50% con el Estado, son adicionales a las inversiones ordinarias que le corresponden. Además, plantea mejoras en el marco normativo competente, que considera "insuficiente y abstracto", y recomienda que se solucionen incidencias, como la "demora" excesiva en el cierre de anualidades o la ausencia de un formato estándar y reutilizable para la justificación de todos los proyectos.

Este fondo se creó para compensar la exclusión de Aragón del Fondo de Compensación Interterritorial (FCI), al tener una renta per cápita superior al 75% de la media de la UE, a pesar de las desigualdades de Teruel respecto a Huesca y Zaragoza. Desde 1993, el 42% de la inversión se ha dirigido a proyectos estratégicos y singulares, entre los que figuran la Ciudad del Motor (131 millones), el aeródromo (50,51 millones) y Dinópolis (27,6 millones).

El gasto en infraestructuras, según la Cámara de Cuentas, "no ha sido suficiente" y el veto a compromisos plurianuales desde 2013 ha impedido que se planteen proyectos de envergadura.

85 millones sin ejecutar

En los 23 años analizados, se han dejado sin ejecutar 85,7 millones de euros, de los que 46,6 millones han podido ser reasignados o reprogramados. Del periodo de ejecución 2013-2016 se quedaron sin ejecutar 39,2 millones, 19,6 del Estado y que ahora podría reclamar.

Los rasgos positivos del FITE en Teruel se traducen en el mantenimiento de un nivel de renta per cápita superior al promedio nacional, aunque la contribución de Teruel al PIB aragonés y al nacional se ha reducido, y la tasa de paro, que es un 5% inferior a la española. En el otro lado de la balanza se sitúa la pérdida de población (8.118 habitantes menos) y el aumento de núcleos despoblados y el stock de capital (la media de la riqueza de sus activos), que aumenta por debajo de la media española y de la aragonesa.

La Cámara de Cuentas recomienda reforzar la vigilancia de la sociedad SUMA Teruel, que "no está sujeta a los controles y supervisión a los que se someten otros operadores financieros" y, según el informe, "el 40% de los préstamos concedidos se encuentra en situación de morosidad o se consideran fallidos".

El organismo fiscalizador considera que es "cuestionable" que se financien como "proyectos de inversión" ampliaciones de capital para cubrir pérdidas corrientes, la celebración de eventos culturales o deportivos o actividades de promoción, y cita a modo de ejemplo la Ciudad del Motor.

El informe propone, además, que ante la insuficiencia de infraestructuras y la "deficiente" prestación de servicios básicos en Teruel, debería estudiarse la posibilidad de incluir como proyecto generador de renta y riqueza el mayor coste que supone la prestación ordinaria de servicios. Así se podrían financiar proyectos de inversión en el ámbito sanitario y educativo.

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