Por los hechos de esta historia, la protagonista tiene pinta de caracterizarse por una cabezonería destacable, pero aun así tiene guasa: una profesora despedida por poner un cero a alumnos que no entregaron un trabajo en plazo. Ha ocurrido en Florida y la docente se llama Diane Tirado. Pese a que una instrucción de la escuela en la que daba clase decía claramente que los estudiantes no podían recibir una nota inferior al 5 (50% en concreto), la profesora se empeñó en poner un rosco a varios alumnos gandules, a los que avisó repetidamente de la fecha de entrega del susodicho trabajo. Y aunque el empeño de Tirado tiene su sentido, lo cierto es que lo único que obtuvo fue un fulminante despido. Acompañado, eso sí, de numerosos mensajes de apoyo.