La utilización de mejores materiales para el tren del futuro, el desarrollo de tecnologías que faciliten la asistencia de las personas mayores, la redefinición de los trabajos en las fábricas para una más adecuada interacción con las máquinas y el impulso del transporte inteligente y ecológico se hallan entre los objetivos planteados en los 21 proyectos europeos del programa Horizonte 2020 (H2020) en los que está trabajando en la actualidad el Instituto Tecnológico de Aragón (Itainnova). Un conjunto de iniciativas apoyadas por la Comisión Europea con fondos por 5,2 millones de euros en las que el centro aragonés colabora con 250 entidades.

"Todos los proyectos están en marcha y en varios de ellos necesitaremos contar con laboratorios que aún estamos instalando", apunta Ángel Fernández Cuello, director de Itainnova, tras señalar la importancia de participar en la iniciativa H2020, el mayor programa de investigación e innovación en la Unión Europea, con un presupuesto de casi 80.000 millones de euros para el periodo 2014-2020. "El objetivo del programa", destaca, "es que trabajemos o diseñemos todo lo que veremos en las fábricas y en la vida a partir del año 2030".

Reconocen en el seno de Itainnova la importancia de trabajar en estos proyectos con tantas entidades distintas, muchas a la cabeza en sus especialidades en materia de I+D+i, entre ellas centros tecnológicos y empresas de diversos tamaños, algunas potentes multinacionales. "Esto hace que se compartan riesgos en los desarrollos, al tiempo que permite adquirir conocimientos punteros que luego podemos transferir a las empresas de nuestro entorno", señalan desde el centro.

Entre los proyectos H2020 en los que participa Itainnova los hay de tecnología para asistencia de personas mayores, otros de materiales para el futuro, los relacionados con el impulso de la denominada industria 4.0 o los de ‘big data’ aplicada a la transformación del transporte. Ángel Fernández cuenta las bondades de los que resultan fácilmente explicables para el gran público y lamenta que otros, de igual o incluso mayor importancia, no lo sean tanto.

En el capítulo de materiales, ámbito en el que la UE pide "que se vaya más allá de lo que existe", reseña el director de Itainnova, el centro tecnológico aragonés trabaja en uno vinculado al diseño del ferrocarril del futuro para empresas como CAF, Alstom, Thales o Siemens, Met4Rail. El centro aragonés trabaja aquí en el desarrollo de materiales compuestos resistentes al fuego y en el diseño modular ‘inteligente’ para, por ejemplo, los sistemas de puertas.

Nanofibras

En materiales, el Instituto Tecnológico de Aragón trabaja en otra iniciativa, denominada Modomp, que pretende conseguir ahorros en el uso de nanofibras en aeronáutica y automoción con empresas como Thales, Aernnova o Brembo, en este último caso con la matriz italiana (la firma tiene una planta en Zaragoza, ubicada en La Muela).

En automoción Itainnova está presente en el proyecto XILforEV, que pretende desarrollar coches eléctricos en su laboratorio de sistemas mecánicos ‘inteligentes’ (SSyS), creando un entorno experimental complejo para este fin. Se trata de que un componente mecatrónico, por ejemplo, pueda ser montado en un coche virtual, explica Fernández. "Al hacer ese ensayo virtual podemos saber si vale la pena fabricar el prototipo de ese componente o no", indica.

La participación en iniciativas H2020 está permitiendo a Itainnova apostar y testar herramientas como el ‘big data’ y el ‘blockchain’. El proyecto Transforming Transport (TT), por ejemplo, debe demostrar las transformaciones que el ‘big data’ aportará a la movilidad y la logística. Así, 49 entidades entidades lideradas por Indra trabajarán en logística compartida en la que se busca la interconexión de centros de transporte.