El IAM ampliará las ayudas económicas para las víctimas de violencia machista

Prevé reforzar las prestaciones de las mujeres más vulnerables y los huérfanos.

La directora del IAM, Natalia Salvo.
La directora del IAM, Natalia Salvo (derecha).
Gobierno de Aragón

El Instituto Aragonés de la Mujer (IAM) quiere ampliar y reforzar las prestaciones que se destinan a las mujeres víctimas de la violencia machista.

Como primer paso ha abierto una consulta pública, cuyo plazo finaliza la semana próxima, que servirá de orientación y base a un decreto que regulará una serie de prestaciones económicas para estas mujeres. El objetivo de esta norma, explica Natalia Salvo, directora del IAM, es ofrecer ayudas complementarias porque entienden que las que hay ahora reguladas por el Estado son "muy insuficientes" o dejan fuera a un grupo importante de estas víctimas de la violencia.

Por ejemplo, no contempla ayudas de ningún tipo para aquellas mujeres que sufren violencia fuera del ámbito de la relación de pareja, la que se ejerce sobre las mujeres por el hecho de serlo. "Si el agresor no es la pareja de la víctima –explica Salvo– la mujer queda excluida de las prestaciones establecidas en la ley orgánica; no tendría reconocido el derecho a percibirlas". "Y en cambio, tanto nuestra legislación autonómica –recuerda–, como el Convenio de Estambul sí las considera víctimas de violencia, aunque no responda al concepto de violencia de género que define la ley orgánica estatal".

Otro ejemplo son las mujeres mayores de 65 años. Salvo apunta que este tipo de víctimas, si no han trabajado nunca fuera de sus casas, si no han tenido un empleo remunerado, cuando denuncian a su agresor quedan en una situación muy vulnerable porque carecen de recursos.

La directora del IAM considera que debería estar más protegidas porque, por edad, muchas de ellas han sufrido "el peso de la tradición, de aguantar maltrato sin quejarse. Y es una injusticia que se queden descolgadas de las ayudas". Para estas víctimas, el decreto planteará que se amplíen las prestaciones que ya les reconoce la ley orgánica como víctimas de violencia de género.

Por último, hay una tercera línea de actuación que pretende reforzar las prestaciones destinadas a los huérfanos de mujeres muertas a manos de sus parejas. "No es justo que después de sufrir el drama de perder a la madre, los hijos e hijas de estas mujeres se vean doblemente penalizados". Por un lado, por la muerte de la madre y la entrada en prisión del padre; y por otro, por la pérdida de recursos económicos derivados de estas dos circunstancias.

Filosofía de renta básica

De momento, se está en la fase de consulta pública previa a la elaboración del proyecto de decreto que regule estas prestaciones. Paralelamente, explicó Salvo, el IAM está realizando las encuestas y estudios oportunos para saber cuántas mujeres y huérfanos podrían ser perceptores de estas ayudas económicas complementarias. Tampoco se sabe, de momento, qué cuantía económica se destinará a estas tres líneas de actuación, que deberá salir de la partida de 4,7 millones que le corresponden a Aragón en el reparto de los fondos del Pacto de Estado. Lo que sí tiene claro el Instituto Aragonés de la Mujer es que las prestaciones tendrán la misma filosofía que la renta básica.

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