Aragón pide compensaciones económicas y coordinación para acoger a más migrantes

El Gobierno central no destinará más fondos este año pese al aumento de llegadas y la demanda de las autonomías. La reunión de la Conferencia Sectorial de la Inmigración concluyó sin medidas ni acuerdos concretos.

Teresa Sevillano –a la derecha–, durante el Consejo Sectorial de Inmigración celebrado en Madrid.
Teresa Sevillano –a la derecha–, durante el Consejo Sectorial de Inmigración celebrado en Madrid.
DGA

Aragón también está haciendo frente a la creciente presión migratoria que está recibiendo España. Y por este camino está dispuesta a seguir siempre y cuando haya una mayor coordinación, una responsabilidad compartida entre todas las autonomías y compensaciones económicas desde el Gobierno central. Este fue el mensaje que lanzó este lunes la directora general de Igualdad y Familias de la DGA, Teresa Sevillano, con motivo de la Conferencia Sectorial de Inmigración que se celebró en Madrid presidida por la ministra de Trabajo y Migraciones, Magdalena Valerio.

Sevillano, que agradeció la convocatoria de este órgano que no se reunía desde septiembre de 2015, mostró la disposición del Ejecutivo autonómico a "gestionar adecuadamente" lo que corresponda, aunque exigió que ello vaya acompañado de una "compensación". En el caso de los programas de refugiados y acogida humanitaria, gestionados por entidades que dependen del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, explicó que desde la DGA se cubren aspectos educativos, sanitarios y de servicios sociales que suponen un "esfuerzo importante".

El jarro de agua fría llegó cuando la ministra de Trabajo aseguró que el Ejecutivo de Pedro Sánchez no tiene previsto destinar más fondos y recursos "de aquí a fin de año" para políticas de inmigración, a pesar de las reclamaciones de los distintos territorios. En este sentido, sí anunció la intención de recuperar en los Presupuestos Generales del Estado para 2019 el Fondo para la Integración, Acogida y Refuerzo Educativo de los Inmigrantes –creado por el gobierno socialista en 2004, pero "abandonado" por el PP desde el año 2012–.

Precisamente, la directora general aragonesa de Familias centró su reclamación económica en la recuperación de estas ayudas. Recordó que gracias a ellas la recepción de inmigrantes que se hizo en España en la primera década de este siglo fue "ejemplar".

Aunque la reunión había generado gran expectación en torno al reparto equitativo de los más de 8.000 Menores Extranjeros No Acompañados (Menas) que están poniendo en jaque la red de acogida, no se habló de cupos ni de cifras económicas concretas. Valerio sí admitió fallos en la contabilización de estos chicos, ya que las cifras de Madrid no coinciden con las de las autonomías. Para avanzar en las medidas concretas, las comunidades quedaron emplazadas para el próximo septiembre.

Un pacto sin partidismos

Teresa Sevillano negó este lunes que exista una "avalancha" de migrantes, aunque sí un "repunte". Aseguró que "es de sentido común" pensar que no hay un "efecto llamada" al ver que alguien que viene de miles de kilómetros le cuesta años llegar al territorio nacional. Reivindicó un pacto por la inmigración "que deje fuera intereses partidistas".

Mientras, Aragón sigue recibiendo a migrantes, bien porque son derivados a centros con recursos específicos o porque ellos mismos lo eligen por contar aquí con algún apoyo familiar o conocidos. Así, por ejemplo, el Centro Temporal de Acogida, Emergencia y Derivación de personas migrantes (CAED) habilitado en el Albergue Municipal El Prado de Mérida gestionó este lunes la salida de 42 personas con destino a la capital aragonesa, Barcelona y Bilbao.

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