"Nadie se quiere mover de Zaragoza"

En Manzanera, una localidad turolense de 400 vecinos que en julio y agosto se llena de veraneantes y turistas, el médico titular, Alfredo Morte, tiene muy claro cuál es el problema de la Atención Primaria."La Administración dice que es necesaria una reorganización de los profesionales, pero lo cierto es que faltan", asegura. Si a ello se añade que"ningún médico quiere moverse de Zaragoza", la situación se complica mucho para aquellos centros de salud más alejados de esta ciudad, como ocurre con el de Sarrión, del que depende el consultorio de Manzanera y el Punto de Atención Continuada (PAC) de Arcos de las Salinas, precisamente el centro sanitario más distante de la capital aragonesa.

"Todo el mundo prefiere un contrato no estable y malo en Zaragoza antes que uno bueno lejos de allí", aclara Morte. Y añade que esta circunstancia queda patente en el hecho de que nadie se inscribe en las bolsas de trabajo para plazas en el medio rural.

Alfredo Morte, que lleva dos años en Manzanera, no contará con un compañero de refuerzo este verano, como tampoco lo tuvo el pasado, pese a que la población alcanzará las 2.000 personas. Es entonces cuando aflorará otro de los problemas que padece la medicina en el medio rural, como es la deficiente conexión a Internet.

«Hay días que hacer una simple receta cuesta diez minutos y no digamos cuando hay que renovar la receta electrónica a una persona mayor, que toma varios medicamentos", señala Morte. Según subraya este facultativo, Internet funciona aún peor cuando el pueblo está lleno de gente en verano,"por lo que hay días que tengo pacientes esperando para entrar a la consulta durante más de media hora"."Un simple copia y pega de un historial médico de una web a otra puede tardar cinco minutos", se queja Alfredo Morte.

Tampoco habrá sustituto para sus vacaciones. Las cubrirá otro compañero, igual que él tendrá que hacer guardias en el PAC de Arcos de las Salinas y recorrer 25 minutos en coche por una mala carretera cada vez que se produzca una urgencia en este municipio.

Destaca que, ante la dificultad para encontrar quien cubra el puesto ante cualquier eventualidad del titular, resulta"prácticamente imposible" que el médico se desplace unos días a Zaragoza para actualizar su formación."Un día puedes cerrar la consulta, pero varios, no", afirma."Aquí lo peor es el futuro, porque cuando una plaza se quede vacía –y va a haber huecos por jubilaciones–, no habrá quien la cubra", alerta.