La recaudación de Sucesiones cae un tercio, pero la DGA logra compensarlo con el IVA

El conjunto de los impuestos cedidos y propios se reduce casi un 12% hasta junio y lastra los ingresos totales, 1.362 millones, una cifra similar a la de 2017.

El consejero de Hacienda y Administración Pública, Fernando Gimeno.
Gimeno espera que el impuesto de Donaciones recaude como máximo 2,5 millones
José Miguel Marco

El Gobierno de Aragón logró el año pasado batir el récord de recaudación del impuesto de Sucesiones y Donaciones, pero ahora está muy lejos de poder repetirlo. Es más, los derechos reconocidos han sufrido un severo retroceso en los primeros cinco primeros meses del año, hasta el punto de recortarse en un tercio respecto al mismo periodo de 2017. Si entonces se acumulaban 84,68 millones de euros, ahora la cifra se limita a 56,3 millones. Es decir, la caída supera los 28 millones, aunque las arcas autonómicas lo han logrado compensar con el crecimiento del IVA, fruto de una mayor actividad económica.

De mantenerse el mismo ritmo en el resto del ejercicio, el Gobierno PSOE-CHA no logrará cumplir siquiera al cierre los 149 millones presupuestados por el impuesto de Sucesiones, una cifra que ya era de por sí muy conservadora respecto a los más de 200 millones con los que acabó el año pasado.

Los datos de la Intervención General de la DGA evidencian que tanto el conjunto de los tributos cedidos como los propios de Aragón han sufrido un retroceso de enero a mayo, aunque lo que verdaderamente lastra las cuentas son los ingresos por herencias. Hasta el punto de que, en plena recuperación, el conjunto de la cesta de impuestos apenas ha logrado de enero a mayo una mínima evolución positiva, del 0,8%, hasta alcanzar los 1.362 millones. Esto supone 11 millones más que hace un año.

El consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, lo achaca al hecho de que el año pasado hubo varias herencias de elevada cuantía y que la mayor de ellas, de 27 millones, tuvo entrada a principios de año en Zaragoza. No obstante, la evolución mensual de la recaudación neta es negativa desde que empezó el año, entre un -45,8% en enero y el -1,20% de abril, aunque en mayo volvió a caer un 21,56%.

Gimeno confía en que como el número de herencias es similar, se acabe cobrando a lo largo del ejercicio alguna de mayor importe para alcanzar las previsiones presupuestarias. "Estoy convencido de que se irá aproximando mes a mes", ha dicho.

Efectos de la subida fiscal

Los números constatan que la subida fiscal aplicada por el Ejecutivo de Lambán en 2016 ha tocado techo y que ahora incluso revierten los números. Si los impuestos cedidos (que engloba principalmente los de Sucesiones, Transmisiones, Actos Jurídicos Documentados y Patrimonio) seguían disparados hace un año, ahora los derechos reconocidos se han reducido un 11,68%, de 166 a 146 millones.

El problema son las herencias, dado que el segundo tributo en importancia, el de Transmisiones, ha roto la tendencia y ha subido de enero a mayo, con casi 5 millones extra, de 45,9 a 50,8. Esta realidad se justifica en las mayores operaciones de compraventa de vivienda de segunda mano y la mayor cuantía de las operaciones, fruto del alza de los precios.

Los tributos propios caen incluso unas décimas más, hasta rozar el 12%, fundamentalmente por el Impuesto de Contaminación de las Aguas. El retroceso es el del 18%, de 28,4 a 23,2 millones, aunque Gimeno confía en darle la vuelta en el momento que el Ayuntamiento de Zaragoza le facilite los datos para cobrar también los recibos de 2017 (se han girado los de 2016 en la capital).

La otra cara de la moneda están en las tasas autonómicas, que otro años más se disparan y crece de nuevo un 10,88%, aunque su aportación no es determinante: 6 millones.

Mientras, los tributos dependientes del Estado (IRPF, IVA y consumos) que reciben las arcas autonómicas se han incrementado discretamente, un 3%, pero su aportación es el grueso, que ha pasado de 1.137 a 1.172 millones.

Revertir los números

El consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, confía en revertir los números a fin de año y acabar con una ejecución de los ingresos incluso superior al 100%, que en el presupuesto definitivo están fijados en 3.609 millones de euros. Su argumento lo basa en el comportamiento de la economía, que está permitiendo que el IVAhaya aumentado un 8% respecto a las previsiones de enero a mayo y que por primera vez en la presente legislatura no solo se cumplan, sino que superen las estimaciones presupuestarias en Transmisiones Patrimoniales (10,78%) y en Actos Jurídicos Documentados (un 4,47%).

Por el momento, los derechos reconocidos alcanzan los 1.362 millones, un 37,76% del total y que representan dos puntos menos que en el mismo periodo del año pasado.

Fernando Gimeno hace hincapié en que también habrá mayores ingresos provenientes de la Unión Europea, lo que ayudará a cuadrar las cuentas autonómicas en positivo. "Los gastos rondarán de nuevo el 96%-97%, como el año pasado, ya que es muy difícil superar este porcentaje", añadió.

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