El Gobierno aragonés intensifica los esfuerzos para ajustarse al objetivo de déficit de la Comunidad, fijado en un 0,4% para este año. El borrador del Plan Económico y Financiero (PEF) remitido al Ministerio de Hacienda contempla el ingreso de 44 millones adicionales por el Impuesto sobre la Renta, que se deriva de las medidas adoptadas a través de la ley 10/15 de medidas para el mantenimiento de los servicios públicos de la Comunidad, y recortes por valor de 33 millones de euros, para alcanzar un ajuste de 77 millones. La limitación del gasto contempla los 24 millones correspondientes a los acuerdos de no disponibilidad, otros seis millones de ahorro de intereses y dos más por ajustes entre los que figura la compra centralizada de medicamentos.

Con la información aportada por Aragón en el PEF, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) aprecia "factible, aunque ajustado" el cumplimiento del objetivo de estabilidad sin correcciones adicionales, y considera bajo el riesgo de incumplimiento de la regla de gasto en el ejercicio. Estima que los acuerdos de no disponibilidad adoptados por Aragón, por valor de 24 millones, "relajarán la tensión sobre el objetivo de estabilidad", si bien alerta de que la consecución será "ajustada por la evolución al alza del gasto".

Si se confirma esta previsión, sería la primera vez en los últimos cinco años que Aragón se ajusta a los parámetros establecidos. Desde 2013, ha incumplido los objetivos de estabilidad todos los ejercicios, la regla de gasto en 2015 y 2017 y el objetivo de deuda en 2013 y 2014. La Comunidad ha incumplido los objetivos de déficit en los tres últimos años, y en abril de 2018 alcanzó un 0,42%, por encima del 0,4% fijado para todo el año.

De ahí que en su último informe, la Intervención General de la DGA advertía de que sería necesario recortar el gasto de las consejerías en 40 millones para cumplir el déficit porque el agujero en el presupuesto se puede disparar por la concertada, las becas de comedor y las ayudas por las riadas. No obstante, el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, confiaba hace unos días en revertir la situación gracias a los 290 millones que recibirá Aragón por transferencias del Estado tras la aprobación de los presupuestos del Estado y la aportación ‘extra’ (entre 60 y 80 millones de euros) de fondos europeos por programas cofinanciados con la DGA.

El déficit se desbocó el año pasado al alcanzar un 0,92%, cuando el objetivo estaba fijado en un 0,6%. En el borrador del (PEF) analizado por la Airef, la DGA atribuye el incumplimiento al "desviamiento del gasto", principal concentrado en "la remuneración de los asalariados en los ámbitos sanitario y educativo", y en los conciertos con los colegios.

El PEF actualiza el presupuesto inicial de la Comunidad al recoger una evolución de los gastos no financieros más acorde con el cierre de 2017, y pasan de 4.327 millones de euros a 4.693. También incluye cambios en los ingresos no financieros, rebajando en tres millones la asignación por el sistema de financiación autonómica (3.552 millones) y elevando en ocho millones los ingresos corrientes (811 millones).

En aras de alcanzar el objetivo de déficit, destaca como novedad la adopción del acuerdo de no disponibilidad por 24 millones de euros e incorpora, además, la mejora esperada de ingresos distintos de recursos del sistema de financiación, con el "efecto positivo" de los 44 millones adicionales en el IRPF.

El informe de la Airef concluye que la evolución prevista de los recursos llevaría a la Comunidad a alcanzar un déficit del 0,4%, igual al objetivo de estabilidad con un crecimiento del gasto computable del 1,2%, que permitiría el cumplimiento de la regla de gasto. El ajuste que debe realizar la Comunidad para alcanzar dicho déficit supone cerca de cinco décimas del PIB. Dicho ajuste, según el PEF, vendría dado por un crecimiento del conjunto de los recursos superior al 5% y un aumento esperado de los empleos de en torno al 1%.