Por
  • Víctor Orcástegui

Lluvia de millones

Las carreteras aragonesas necesitan un impulso inversor.
Las carreteras aragonesas necesitan un impulso inversor.
Toni Galán

A Aragón le ha tocado una inesperada lluvia de millones en los Presupuestos del Estado. Al menos, sobre el papel. No sabemos si ha sido una conjunción astral o una conjura de los hados. Pero algo habrá tenido que ver la habilidad negociadora de las dos senadoras del PAR. Y también, la extraña situación política que se ha creado después de la moción de censura, con el PSOE defendiendo los Presupuestos del PP y los populares votando de la mano de los podemitas para enmendarlos.

Sea como fuere, la carambola se ha producido y ahí están los 574,5 millones de euros dispuestos para regar las carreteras y los ferrocarriles aragoneses, que falta les hace. Pero insistamos, eso es sobre el papel. Porque, para empezar, estamos ya en el mes de julio -no sé, por cierto, si alguna vez se habían demorado tanto los Presupuestos- y la maquinaria de la Administración se mueve lentamente. Y eso, cuando el Gobierno quiere que se mueva. Conseguir que los millones lleguen a su destino no será fácil. Ya puede el Ejecutivo aragonés ponerse las pilas y dar la lata en Madrid para que no se duerman los ministros si es que queremos aprovechar la oportunidad. No habrá muchas como esta.