Los rectores confían en que el nuevo Ejecutivo revierta los recortes

Becas, bonificaciones de matrículas y rebajas de tasas, sí; pero no a costa de los presupuestos de las universidades. Así de taxativo se pronunció este viernes el presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), Roberto Fernández, que viajó a Zaragoza para mantener una reunión con la comunidad universitaria aragonesa.

El objeto del encuentro era informarles de la situación y los retos a los que se enfrenta el sistema universitario español. Instituciones que él considera que están "fantásticamente bien". "Estamos en un periodo histórico –dijo–. Se puede afirmar que tenemos el mejor sistema universitario que ha habido jamás en la historia de España. Muy equiparable en eficacia y eficiencia a la mayoría de los europeos".

Sin embargo, esta buena percepción no evitó que el presidente de la CRUE recordara también otras dos realidades mucho menos gratificantes: los recortes sufridos en los años pasados y la necesidad imperiosa de que se reforme la actual ley de Universidad.

"Hemos sufrido grandes recortes presupuestarios en todos los niveles y también en recursos humanos –declaró a los medios de comunicación poco antes de iniciarse la reunión–. Por tanto, ahora esperamos que con la nueva situación política se reviertan los recortes que las universidades han sufrido de manera injusta y poco meditada".

Además de este deseo, el presidente de la CRUE avanzó que estarán muy "proactivos" para tratar de que el Congreso de los Diputados cree una comisión que debata una nueva Ley general de Universidades. Aunque no quiso detallar qué le gustaría que recogiera esa norma, Fernández explicó que debería "reforzar la autonomía real y verdadera de las universidades y flexibilizar los modelos de contratación, para hacer que la gobernanza universitaria sea más eficiente y eficaz".

El presidente de la CRUE y rector de la Universidad de Lérida reconoció que ahora hay aspectos de la actual ley que son "un grave problema".

"Por parte del Estado se debería tener en cuenta que las universidades son Estado, no Gobierno, y que deben atenderse sus especificidades".

En cuanto a la política de reducción de tasas y matrículas, Fernández recordó que la CRUE, la asociación que aglutina a todas las universidades públicas y privadas españolas, siempre dará el visto bueno a todo lo que favorezca la "equidad social". "Todo lo que permita que un estudiante que quiera jugar la gran baza que es la universidad como ascensor social tenga la oportunidad de hacerlo, nos parecerá bien", declaró.

"Pero en ningún caso –apostilló– las rebajas de las matrículas de los estudiantes deben ser a costa de los presupuestos universitarios, sino de los presupuestos nacionales o de cada autonomía".