Aragón se ha afianzado en los últimos años como una Comunidad exportadora. Los bienes hechos en Aragón que llegan al extranjero han crecido en el último lustro hasta firmar en 2017 un récord histórico. En total, se exportaron productos por valor de 12.000 millones de euros, destacando entre ellos el sector de la automoción, el textil y las manufacturas, y el agroalimentario.

Toda esta conquista exterior Aragón la ha conseguido además manteniendo su saldo comercial en positivo. Es decir, que Aragón compra al extranjero menos de lo que exporta, en concreto productos por valor de 10.800 millones de euros el año pasado. Sin embargo estas cuentas no salen igual para la Comunidad en el momento en el que se introduce todo lo que se compra y vende con otras regiones de España.

Según el último informe elaborado por C-Intereg, grupo investigador interautonómico que estudia los movimientos comerciales, Aragón consume y compra hasta 4 veces más productos de fuera de la Comunidad que producidos en el territorio.

En total el gasto en 2017 de la Comunidad entre todos sus actores (familias, empresas e instituciones) ascendió a 36.451 millones de euros. De ellos, la mayor parte, un 51,6% (18.827 millones) fueron en productos procedentes de otras autonomías españolas, un 28,8% fue en bienes fabricados en el extranjero (10.875 millones) y solo un 18,5% (6.759 millones) fue en la compra de bienes y productos hechos en Aragón.

Para bajar a tierra estas cifras macroeconómicas, si dividimos el total de las compras de Aragón entre los habitantes de la Comunidad sale que cada uno gastó 28.000 euros (una suma orientativa ya que se incluye el gasto de empresas y del Gobierno y Ayuntamientos). Con estas cuentas, nuestro aragonés 'medio' empleó el año pasado 14.450 euros aproximadamente en bienes de otras autonomías de España, 8.340 en productos extranjeros, y solo 5.180 en compras que llevaran el sello de la Comunidad.

El 79% de los productos aragoneses se vende fuera

La situación de Aragón en este sentido no es muy distinta al resto de España, aunque sí que se acentúa más. La media de las autonomías españolas consumen el 24% de sus productos hechos en su territorio y en casos como Madrid, el mayor motor económico, esta tasa se rebaja al 11%. Comunidades como las dos Castillas, también condicionadas como Aragón por una escasa población -y por lo tanto menor capacidad de consumo- en un gran territorio también tienen proporciones de consumo de sus propios alimentos similares a los de la Comunidad.

Por el contrario, las autonomías que se podrían llamar más 'autosuficientes' son Galicia, donde de todo lo que se consume el 34% se ha creado en su tejido industrial o alimentario. A esta le siguen Extremadura, Valencia y Andalucía, cercanas al 30%.

Pese a esto, la popularidad de los productos aragoneses en el resto de España va a más. El año pasado se vendieron a otras regiones españolas y el extranjero el 79% de todos los bienes hechos en territorio aragonés. En total estas ventas sumaron un valor superior a los 12.900 millones de euros, 400 más que hace justo un año.