Una avenida tipo "meseta", más lenta pero más duradera

La crecida de este año es diferente a la de 2015 y tiene características especiales. El consejero de Presidencia del Gobierno de Aragón, Vicente Guillén, explicó ayer –tras la reunión que diariamente celebra el Centro de Coordinación Operativa (Cecop)– que en opinión de los técnicos, esta avenida está llegando "en modo meseta". Una modalidad tiene ventajas e inconvenientes.

La llegada de la crecida es más lenta

Esta sería la principal característica de este tipo de avenida. La crecida llega con mayor lentitud. De ahí que los técnicos se estén viendo obligados desde el viernes a revisar y retrasar a diario la hora prevista para la llegada de la cresta de la crecida. En un principio, se barajó la noche del viernes como el momento más probable para que la punta de la crecida entrara en tierras aragonesas, pero finalmente esta situación se produjo a media mañana del sábado. Esto ha hecho que se retrasara también la llegada de la avenida a Zaragoza capital. La última previsión apuntaba a la noche de ayer como el momento más probable de la llegada.

La avenida dura más tiempo

Como contrapartida, la avenida será más duradera. Según explicó Guillén, en este tipo de crecidas, el agua sube lentamente de nivel, pero una vez alcanzado su máximo pico permanece en ese tope durante días. A esto se añade otra desventaja y es que en función de las condiciones meteorológicas, la situación puede empeorar. Dependiendo de las lluvias de los próximos días o del calor que se registre y que derrita la nieve de las cimas, el nivel del agua puede aumentar o disminuir.

Más tiempo para reaccionar y prevenir

La avenida del Ebro de este año, con un comportamiento tan diferente a la de 2015, ha dejado más tiempo para la prevención. El Gobierno de Aragón explicó que los efectivos desplegados han podido planificar mejor las actuaciones llevadas a cabo, se han podido coordinar a la perfección y han tenido tiempo para tomar las medidas oportunas en función de la evolución de la crecida.

La avenida, menor que la de hace 3 años

Por los datos que se conocen hasta ahora, la avenida es menor a la de 2015. Al menos en la ribera alta y en Zaragoza capital. Lo que ocurra en la ribera baja aún es una incógnita. Es probable que el Ebro llegue a esas poblaciones con un caudal similar al que registró en la crecida de hace tres años. El consejero de Presidencia, Vicente Guillén, reconoció ayer que Pina de Ebro era el punto "más crítico" de esa zona.

El Gállego vierte 200 metros cúbicos por segundo al Ebro y hace que la crecida sea aún mayor aguas abajo

El hecho de que la avenida extraordinaria esté causando mayores problemas en la ribera baja que en la alta se debe al importante caudal de agua que está aportando el río Gállego al Ebro en Zaragoza. Durante este domingo, el afluente estaba vertiendo unos 200 metros cúbicos por segundo, lo que ha obligado a reforzar aún más las motas de las poblaciones aguas abajo.Durante la riada de 2015, la aportación del Gállego fue mínima, de ahí que ahora se esté anegando más superficie que entonces.