Paraíso
Perdida en las profundidades de mi memoria, oigo, como si fuera ajena al mundo, el replicar del viento al chocar con las altas cumbres de los pinos. ¿Cuándo he llegado aquí? Desamparada ante la triste realidad que se cernía sobre mí, mis pies me guiaron aquí, al Posets-Maladeta, mi paraíso particular donde poder evadirme del mundo. Miro a mi alrededor, y la nostalgia me embarga. Recuerdos infantiles que creía ya olvidados vienen a mi. Mi mundo ha cambiado, hasta el punto de añorar esa infancia tan dura y violenta de la que deseaba escapar. El único sitio donde podía ser niña, es el sitio que ahora, desesperada, me vuelve a acoger. Camino. No se a dónde, pero camino. Detengo mi paso ante un sitio que creía inexistente. Un gran lago se abre ante mis ojos. Un lago recién descubierto para mi. Caigo de rodillas y siento lágrimas recorrer mis mejillas. El cáncer me va a llevar y lo último que voy a ver es este lago. Este lago que ahora me acoge y en el que mi alma siempre estará.