Aragón Stop Sucesiones y Plusvalías calificó ayer de "limosna" la reforma del impuesto que ultima la DGA para evitar que los aragoneses sean los que más paguen al heredar, pero sin llegar siquiera a elevar el mínimo exento al millón de euros como ha propuesto Ciudadanos. El portavoz del colectivo, Miguel Ángel Ramos, exigió coherencia al Gobierno PSOE-CHA tras haber prometido el presidente, Javier Lambán, hace poco más de quince días que los aragoneses no pagarán "ni un euro más por heredar" que el resto de los españoles. "Cuando menos, su reforma debería incluir una rebaja que nos equipare al resto de autonomías", defendió.

Como informó el domingo este diario, la coalición PSOE-CHA sigue defendiendo la subida fiscal que aplicó en 2016, pero la creciente oposición le ha obligado a dar un giro. Convencido de su discurso de que la recuperación de los servicios públicos requiere el pago de impuestos, el ejecutivo solo pretende aplicar un ajuste impositivo para dejar de ser el ‘campeón’ de la recaudación fiscal por Sucesiones y Donaciones. Ahora pagan aquellos que heredan más de 150.000 euros y disponen de bienes por un valor superior a los 400.000, unos límites que subirán ahora sin llegar a la propuesta de Ciudadanos. Así, quieren aplicar progresividad para que las rentas y patrimonios más altos paguen proporcionalmente más.

El portavoz de Aragón Stop Sucesiones mostró su "asombro" por el planteamiento de Gimeno y dijo que, con ese discurso, los aragoneses seguirán pagando más que el resto. "Empezar a hablar de cantidades supone entrar en el mercado persa, cuando lo único que debe hacer es copiar a otras autonomías", dijo antes de citar el ejemplo de los socialistas de Andalucía, que han elevado el mínimo a un millón tras pactarlo con Ciudadanos, y los de Extremadura, con una bonificación del 99% para las herencias de padres a hijos y entre cónyuges.

Miguel Ángel Ramos exigió que, en todo caso, la reforma no se demore y entre ya en vigor en el segundo semestre. "La verdadera batalla se debe dar con la nueva ley de financiación autonómica. Defendemos una armonización fiscal en España, pero no al alza como Gimeno.

Las críticas se reprodujeron desde las filas del PP y del PAR, que también se refirieron al compromiso de Lambán de equiparar el cobro de Sucesiones al resto del país. Las críticas las hicieron extensivas a Ciudadanos por ponerse "de nuevo de lado" con una moción que defenderán en el pleno el miércoles (se ha adelantado un día su celebración) para pedir que las clases medias no paguen. Por ello, ambos grupos políticos presentarán sendas enmiendas para que la bonificación de Sucesiones se eleve al 99% entre familiares de primer grado, como en Extremadura, Madrid o Murcia.

El diputado popular Antonio Suárez valoró que la coalición PSOE-CHA no plantea su reforma por convencimiento. "No quieren acabar con la injusticia, van arrastrando los pies porque actúan por la presión de la calle y con el fin de no quedarse solos", sostuvo.

La diputada aragonesista Elena Allué consideró que la propuesta socialista es "electoralista" y consideró que llega tarde, después de tres años "sangrando" a los ciudadanos con su subida fiscal.

Ambos parlamentarios también cargaron contra Ciudadanos por cooperar en el "lavado de cara" de los socialistas, hasta el punto de que Suárez consideró que hacen el juego al presidente Lambán con su moción. "En Ciudadanos no tienen ni los arrestos de pedir lo que vendieron hace dos semanas tras reunirse con Lambán", añadió Allué.

La respuesta de Ciudadanos

El diputado de Ciudadanos Javier Martínez defendió su iniciativa con el argumento de que la prioridad del partido es la supresión del pago de Sucesiones a las clases medias. Aunque su propuesta llega a elevar el mínimo exento hasta el millón de euros, señaló que solo podrán valorar la propuesta una vez se conozcan sus detalles. Igualmente, aludió al informe sobre el impuesto que pidieron al Gobierno y que se entregará esta semana a las Cortes para conocer al detalle los tramos y cuánto dinero suponen. "De este modo, podremos valorar lo que suponen la nuestra y la suya para poder encontrar un punto de encuentro, siempre que exima del pago a las clases medias y sea asumible", sentenció.