Exporta más del 70% de su producción por los cinco continentes. Pero cada año, la Denominación de Origen Campo de Borja elabora una estrategia para seguir conquistando nuevos mercados y afianzar aquellos en los que ya está presente. Con una bandera, la cada vez más reconocida garnacha, la variedad en la que esta D. O. aragonesa situada a los pies del Moncayo es la máxima referencia a nivel mundial.

Este año ha comenzado su programa promocional desde lo más alto. Se ha subido al Jardín del Cielo (Sky Garden), como se conoce la exuberante azotea de uno de los rascacielos más famosos de Londres, el 20 Fenchurch Street, (llamado popularmente con el apodo de Walkie Talkie) para vender sus caldos más prémium. Han participado allí, junto con vinos de toda España y, por supuesto, de otras denominaciones aragonesas, en el Wines From Spain, el certamen organizado por el Instituto de Comercio Exterior (Icex), una oportunidad única en la que coinciden distribuidores ingleses y bodegas españolas.

El Reino Unido es el principal importador de los vinos de Campo de Borja. En este mercado se comercializaron el pasado año el 11% del total de lo exportado. Pero las bodegas quieren más y, sobre todo, nichos de mercado de alto poder adquisitivo.

«Sigue habiendo mucho interés por los vinos de garnacha, una variedad que en los próximos años va a estar muy en boga», señalan al alimón el presidente y el secretario del consejo regulador, Eduardo Ibáñez y José Ignacio Gracia, respectivamente, que insisten en que Campo de Borja lleva 20 años exportando a este país en el que ahora quieren conquistar «a los nuevos consumidores».

Ibáñez reconoce el ‘sambenito’ que arrastra este mercado, al que se asocia con un país que importa mucho vino pero a precios muy bajos, pero insiste en que la nueva estrategia de Campo de Borja es abrirse paso en el mercado de la hostelería británico con sus vinos de garnacha de más alta calidad, como Garnacha Centaria, de Bodegas Aragonesas; Cayus, de Crianzas y Viñedos Santo Cristo; Cuevas de Arom, de la bodega del mismo nombre del Master of Wine aragonés Fernando Mora; Tres Picos, de Borsao; Prados de Pagos del Moncayo, y Alto Moncayo, de la bodega que da nombre al mismo.

Londres es la primera parada de un periplo que incluye presentaciones de los vinos de la denominación zaragozana por diferentes ciudades del Reino Unido. Como broche final, serán los prescriptores de aquel país (periodistas y sumilleres) los que pisen y visiten tierra aragonesa, en los próximos, para conocer los viñedos y las bodegas de los caldos que triunfan en su país.

Profeta en su tierra

Sin perder de vista los mercados exteriores, especialmente China que «se ha convertido ya en el tercer cliente de Campo de Borja, desbancando a Canadá y por detrás de Estados Unidos», recuerda José Ignacio Gracia, la estrategia promocional de esta denominación tiene también la mirada puesta en el mercado nacional, fundamentalmente en su tierra, Aragón.

Uno de los escenarios de la estrategia con la que Campo de Borja quiere ser profeta en su tierra será la capital aragonesa. Allí se celebrará, el 31 de mayo, la XIV Muestra de Garnacha de Campo de Borja, «una cita tradicional en la que los amantes del vino podrán degustar los caldos con los que nuestras bodegas no cesan de conquistar premios y galardones a nivel nacional e internacional», señala Ibáñez.

El monasterio de Veruela, «nuestra joya cisterciense» -destaca el presidente de la denominación- acogerá una nueva edición de las catas ‘Las 4 estaciones de la garnacha’. La primera será la Cata de Primavera, que se celebrará el 24 de marzo, «con una novedosa puesta en escena que a buen seguro complacerá a los amantes del vino, del arte y de la cultura», explican sus organizadores.

Y como uno de los mejores embajadores para la difusión y consumo de los afamados vinos del ‘Imperio de la Garnacha’ son los establecimiento hosteleros, la  D. O. ha renovado también su colaboración con la Asociación de Restaurantes de Zaragoza y provincia-Horeca Zaragoza.

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