La ministra Tejerina asegura en Aragón que "si no hay acuerdo, no habrá trasvase"

La titular de Medio Ambiente supedita las transferencias entre cuencas a que exista consenso. Ratifica su apoyo al plan y anuncia avances en Almudévar, Santolea, Biscarrués y Monegros II.

García Tejerina y Violeta Barba, en la comisión de seguimiento del pacto del agua.
García Tejerina y Violeta Barba, en la comisión de seguimiento del pacto del agua.
Guillermo Mestre

"No habrá ningún trasvase que no esté acordado. Si no hay acuerdo, no hay trasvase. Si no hay acuerdo, no hay que tener temor de un trasvase porque no lo va a haber". Así lo indicó ayer la ministra de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, tras asistir a la comisión de seguimiento de las obras del pacto del agua de Aragón, el plan que salió adelante por unanimidad en 1992 y del que apenas se ha ejecutado un tercio del coste total. Aunque consideró que su respuesta era lo "suficiente rotunda", todos los grupos parlamentarios en las Cortes menos el PP echaron en falta más "concreción". Tejerina siguió la línea marcada por el Gobierno central que aboga por busca consenso para impulsar un Pacto Nacional del Agua.

La ministra quiso dejar claro el compromiso del Gobierno central con el pacto del agua de Aragón, y aseguró que en los últimos seis años se han invertido 400 millones de euros que han permitido regular 1.350 hectómetros cúbicos más e impulsar 320.000 nuevas hectáreas de regadío. A pesar de ello, el importe global de las obras ejecutadas del plan supone un tercio de lo previsto y aún precisa 926 millones de euros más para acabar las obras.

García Tejerina recordó que el desarrollo de infraestructuras hidráulicas permite asentar población y destacó, como uno de los principales valores del pacto del agua de Aragón, que se aprobó por unanimidad. "Avanza a buen ritmo. El compromiso es volver a reunirse a los seis meses para hacer un seguimiento más estrecho y el compromiso del Gobierno es seguir con este ritmo de ejecución". Anunció, como novedades de este año, que se mantendrá el impulso al recrecimiento de Yesa, al embalse de Mularroya, al recrecimiento de Santolea y al pantano de Biscarrués, para el que el Gobierno está redactando un nuevo estudio de impacto ambiental que se ajuste a los criterios fijados en la sentencia de la Audiencia Nacional.

Para la ministra, Biscarrués es necesario: "Somos muy conscientes de todos los beneficios que para Aragón tiene este embalse. Son 35 hectómetros cúbicos de capacidad diseñados para la laminación de las avenidas del río Gállego y para aportar caudales al sistema de riegos del Alto Aragón, donde muchas veces les falta agua".

Como también consideró imprescindible avanzar en el embalse de Almudévar, que recibe una inyección de 70 millones en los que se contemplan 37 millones del pago de expropiaciones (a 20.000 euros por hectárea) y 30 millones para la actualización de 1.200 hectáreas y las obras relacionadas con el ciclo integral del agua.

Recrecimiento de Yesa

Respecto a Yesa, mantiene el fin de las obras en 2021 y garantiza que la seguridad en las laderas de la presa está asegurada con la vigilancia semanal que se realiza a través 400 puntos de control.

La ministra anunció también que tres proyectos vitales para Monegros II, la tubería de Valdurrios, la acequia de La Almolda y el sifón de Cardiel, entrarán en breve en el convenio de Acuaes.

Otro de los aspectos que preocupa a la Comunidad es la reversión de los saltos hidroeléctricos. En este sentido, García Tejerina confirmó que el Gobierno incluirá en la redacción de los nuevos pliegos la necesidad de adoptar medidas que beneficien a los territorios donde estarán ubicados.

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