Asi son los 'dink', los consumidores más buscados por marcas y anunciantes

Se trata de parejas adultas con dos nóminas que deciden no tener hijos. Todo lo que ingresan va destinado al ocio.

Para dejar a alguien, lo más honrado es ser sincero y desterrar del vocabulario sentimental los tópicos y fórmulas manidas.
Dos nóminas y ningún niño a su cargo: los perfectos consumidores.
Pixabay

Dentro del mundo se les conoce como 'dinks' y son el nicho de mercado más codiciado por las marcas y anunciantes. Bajo el neologismo se esconde un perfil que, en mayor o menor medida, todo el mundo tiene a mano: una pareja adulta con dos nóminas y ningún vástago del que hacerse cargo. Es decir: créditos aparte, todo lo que ingresan va destinado al ocio y al consumo de bienes y servicios de todo tipo.

Al cierre del año pasado, los 'dinks', acrónimo de 'ingresos dobles, sin niños' (en su traduccción al inglés) formaban algo más de 765.000 hogares en España, un 4% del total, según la información aportada en un estudio por la consultora AIS Group a partir de la Encuesta Continua de Hogares del INE. Esta cifra es menor que en 2014, cuando se contabilizaban unos 100.000 hogares más bajo la etiqueta.

Zaragoza y Teruel son dos de las provincias con una mayor una presencia, en términos porcentuales, de estas familias. Las dos suman un 4,9% de hogares formados por dos adultos asalariados y ningún niño frente al 3,9% de Huesca. En Aragón viven casi 26.000 familias 'dink'.

La provincia española que lidera esta forma de vida es Barcelona, donde un 6,3% de las viviendas responden al perfil. Le siguen Lérida (5,4%), Baleares (5,1%) y Tarragona (5%). En el otro extremo se encuentran Cádiz, Ciudad Real, Ávila y Jaén, las cuatro con un 2,4%.

¿Cómo son estas familias?

Las personas que tienen claro que quieren compartir su vida con otra, pero prefieren no tener descendencia son, por norma general, urbanitas de entre 25 y 40 años. Lo habitual es que tengan estudios superiores y sumen unas rentas medias o altas.

Se inclinan, en mayor medida, por el régimen de alquiler a la hora de elegir vivienda. Son hedonistas y sus prioridades son las propias de la sociedad de consumo: les gusta viajar, la gastronomía y comer y cenar fuera de casa. También destinan parte de sus ingresos a estar actualizados a nivel tecnológico -no se les escapa un solo ‘gadget’- y destacan por su impulsividad dentro de las tiendas, tanto físicas como virtuales.

La moda y el deporte son otros sectores en los que no se privan y muchos de ellos lo demuestran a través de un uso intensivo de las redes sociales. En cierto modo, comparten el modus vivendi de la generación milenial, apegada a la vida digital. De hecho, el target de los ‘dink’ se guía en buena medida por las valoraciones y comentarios sobre las marcas en internet.

Su poder adquisitivo y esa cierta despreocupación por el gasto los convierte en el objetivo número uno de las marcas y los anunciantes, y por ello cada vez más campañas publicitarias se centran en movilizarlos.

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