La puesta en marcha el próximo año del servicio de bajo coste de Renfe ya ha generado las primeras polémicas. El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda de Aragón, José Luis Soro, ha asegurado que es inadmisible que el proyecto se presente como una forma de acercar el ferrocarril a los usuarios y, de entrada, "se plantee excluir a los ciudadanos y ciudadanas de Aragón". 

Soro ha puntualizado que no tiene más información que la publicada en los medios catalanes (que aseguran que este nuevo tren no tendrá parada ni en Zaragoza ni en Calatayud), por lo que este mismo miércoles se va a dirigir al Ministerio de Fomento para que "en la planificación se tengan en cuenta que Zaragoza y Calatayud no son ciudades de paso sino destinos preferentes". "Confío en que haya sentido común y que todavía no hay nada decidido", ha puntualizado.

Según ha subrayado, no hay ningún criterio técnico que justifique que el EVA no pare en ambas localidades. "No se puede plantear como una lanzadera y que pase rápido por Aragón", ha puntualizado, al mismo tiempo que ha calificado esta posible decisión de "atropello". "Es una decisión inaceptable que no se planteen estas paradas", ha recalcado.

"Estoy seguro de que vamos a tener el respaldo unánime de todos los partidos de Aragón y de todos los agentes sociales. Esto va a ser una lucha colectiva de la sociedad aragonesa", ha subrayado durante su intervención. El consejero ha valorado de manera positiva que "por fin" se tenga en cuenta que tiene que haber un servicio de ferrocarril para todo el mundo, que no sea el "tercermundista del tamagochi, ni el lujo del AVE".