Los aragoneses, los que más dinero gastan en caprichos
El 82,8% afirma elaborar y cumplir un presupuesto mensual de gastos, el porcentaje más alto del país.
Los aragoneses son los que más dinero destinan a darse caprichos, con más de tres puntos de diferencia frente a la media nacional (15,22%). Prefieren destinar mayor parte de sus ingresos a gastos prescindibles, como caprichos y ocio (18,4%), antes que al ahorro (13,1%), según el 'IV Estudio de Comparación Online hacia el Ahorro Inteligente', realizado por Rastreator.com.
El 82,8% de la población de Aragón afirma elaborar y cumplir un presupuesto mensual de gastos, el porcentaje más alto del país, con más de 13 puntos porcentuales por encima de la media nacional (69,3%). De este modo, los consumidores más planificados pueden tener mayor control sobre a qué destinan su dinero y cuánto les queda disponible para otros asuntos como el ocio o el ahorro, aunque estos sigan suponiendo la parte minoritaria de dicho presupuesto.
Los gastos que ocupan la mayor parte de los ingresos de los aragoneses son los destinados a pagar gastos necesarios del día a día -- como facturas, comida o transporte--, abarcando casi la mitad de lo que ganan los consumidores de la región (43,4%), y los dedicados a amortizar las deudas contraídas en el pasado, aunque solo supone el 19,7% del total.
Esta distribución del presupuesto para cubrir las necesidades de consumo básico deja escaso margen para otras cuestiones también importantes como son el ahorro, el ocio e incluso la inversión.
Respecto al resto del dinero disponible, los aragoneses prefieren gastar su dinero en cosas prescindibles (18,4%), como son caprichos, salidas nocturnas y ocio, antes que dedicarlo a ahorrar (13,1%). De hecho, son los que más dinero destinan a darse caprichos, con más de tres puntos de diferencia frente a la media nacional (15,22%). En la misma línea, el 36,2% de los encuestados de la región afirma que no ahorra o no ahorra más porque prefiere darse caprichos.
En lo relativo a la inversión, aunque la proporción de la renta dedicada a ello es modesta, y apenas alcanza el 5,5%, existe una parte de la población aragonesa que prefiere renunciar al consumo actual para obtener beneficios futuros, es decir, hasta un 29,3% de la población de Aragón afirma que destina dinero a este fin y elige invertir algo de sus recursos actuales con la expectativa de recibir una rentabilidad más adelante.
