Los másteres de la UZ atraen a nuevos estudiantes tras adelantar el periodo de matrícula

La Universidad de Zaragoza sigue apostando por los másteres y mantiene la tendencia al alza en la matrícula de nuevos alumnos. Según los últimos datos facilitados por el campus público aragonés, en el curso 2017-2018 se han inscrito un total de 1.578 nuevos estudiantes en los postgrados; la cifra más alta de la última década. No hay que olvidar que en el curso 2013-2014 estas titulaciones llegaron a marcar mínimos históricos con menos de 1.000 estudiantes nuevos. Por el contrario, el volumen total de matriculados en máster ha descendido ligeramente hasta los 2.094 alumnos.

Desde la Universidad de Zaragoza consideran que la implantación del nuevo calendario de inscripción (que adelantaba la reserva de plazas al primer trimestre del año) ha sido clave para afianzar las nuevas matriculaciones. “Los objetivos de este nuevo periodo son varios y los podemos agrupar en dos bloques, uno de planificación y otro académico. Con respecto a la planificación, estas nuevas fechas han supuesto armonizar los periodos de inscripción en másteres con la mayoría de las universidades españolas y, además, poder tener una previsión de la demanda de los diferentes postgrados”, recuerda Gerardo Sanz, vicerrector de Política Académica.

De hecho, tras esta prematrícula, un total de 400 personas reservaron su plaza (previo pago de 200 euros, que posteriormente se descontaban del precio final del máster y cuyo importe se revisará a la baja de cara al próximo curso académico). Esto supone casi un tercio del cómputo final de alumnos de nuevo ingreso. Además, según detalló Sanz en aquel momento, algunos másteres llegaron a cubrir todas las vacantes ofertadas, ya que solo se pusieron a disposición de los alumnos el 75% de las plazas.

“En cuanto al aspecto académico, el objetivo esencial es garantizar a los propios estudiantes de la UZ tengan la posibilidad de reservar una plaza en los másteres de su interés. Además, se pretende atraer a estudiantes extranjeros, sobre todo en aquellos másteres que se imparten en inglés”, subraya Sanz. En los dos últimos años se han puesto en marcha varias iniciativas para incentivar las matrículas: se han reducido un 20% las tasas de los másteres universitarios no habilitantes (aquellos que no son necesarios para ejercer la profesión que se ha estudiado) y se han implantado becas de hasta 4.770 euros para cursar un máster. Asimismo, se está trabajando en una reestructuración de la oferta para “aumentar el atractivo de los mismos”. Consecuencia de ello fue la puesta en marcha de tres postgrados y la suspensión de cuatro.

Estos nuevos másteres han tenido un éxito aceptable, logrando ocupar, al menos, el 50% de sus plazas. Esto es lo que ha ocurrido en el de Biotecnología Cuantitativa. Por su parte, el de Investigación en Filosofía ha logrado ocupar 8 de sus 12 vacantes y el de Dirección y Gestión de Adquisiciones de Sistemas para la Defensa ha llenado más del 95% de sus plazas. Otros másteres que han visto crecer su número de alumnos han sido Nutrición Animal (con 21 más), Química Industrial (13), Relaciones de Género (10) e Ingeniería Biomédica (10). Lo mismo ocurre en diversas especialidades del de Profesorado.

Por el contrario, hay algunos postgrados que no terminan de convencer a los estudiantes. Ingeniería Química ha perdido 13 de los 18 alumnos que tenía el año pasado. El volumen de interesados se ha reducido a la mitad en Evaluación y Entrenamiento Físico para la Salud e Ingeniera Industrial ha perdido una cuarta parte.

Lo más relevante de las nuevas matrículas es el crecimiento experimentado en los másteres no habilitantes (un 13,75% más), cuyo coste es ligeramente más elevado. La reducción del precio realizada hace dos cursos académicos y la puesta en marcha de becas han podido ser clave para este cambio de tendencia. Desde el campus público también lo atribuyen a un “mayor interés de la oferta, que fue revisada en el pasado curso y que, de nuevo, será sometida  a una revisión”. Por su parte, la matrícula de los másteres habilitante apenas ha bajado un 2%.

“Estos datos invitan a perseverar en las medidas emprendidas y a seguir profundizando en nuevas acciones que permitan mejorar nuestra oferta de másteres y aumentar el atractivo de los mismos. De hecho, esta es una de las líneas prioritarias para el curso 2017/18”, puntualiza Sanz.