El Ayuntamiento de Zaragoza recurrirá sus recibos del ICA

El Ayuntamiento de Zaragoza, gobernado por Zaragoza en Común (ZEC), pagará sus recibos del ICA y, acto seguido, los recurrirá. Así lo confirmaron este jueves fuentes del área de Medio Ambiente. El Consistorio se desmarca de este modo de la actitud del concejal de Vivienda, Pablo Híjar –que rompió el suyo en redes sociales–, e irá en la línea de otras agrupaciones integradas en la Red de Aguas Públicas de Aragón (RAPA), que abogan por abonar la cuantía correspondiente y, posteriormente, presentar alegaciones. Por el momento, eso sí, asegura no haber recibido factura alguna.

A esta declaración de intenciones se une el comunicado que emitió ayer ZEC. En él, los comunes animan a los zaragozanos "a participar en la manifestación del próximo 4 de febrero contra el Impuesto sobre la Contaminación de las Aguas para mostrar de manera abierta y contundente su rechazo". Aprovechan, asimismo, para mostrar su satisfacción por los más de 7.000 recursos que se han recogido hasta la fecha.

El escrito busca salir al paso de las críticas realizadas este miércoles por el secretario general de la UCA, José Ángel Oliván, que aseguró que el Ayuntamiento "podría haber hecho más" para evitar el cobro del ICA y defender los intereses de los zaragozanos. ZEC recuerda que el Consistorio "recurrió la orden que regulaba la entrega del padrón y pidió medidas cautelares".

También niega que el cobro estuviese ligado a la negociación de la ley de capitalidad. "Animamos al presidente Lambán a buscar una solución al ICA mediante la vía del diálogo y no a través de la imposición de un impuesto injusto, un nefasto proceder que afecta a miles de familias en esta ciudad", dice Carlos López, coportavoz de ZEC.

"No es la estrategia de Podemos"

Por otra parte, el secretario general de Podemos en Aragón, Nacho Escartín, desvinculó ayer a su partido de la actitud del concejal de Zaragoza en Común, Pablo Híjar, de negarse a pagar el impuesto autonómico. "No es exactamente la estrategia de Podemos de Aragón", explicó. Escartín aclaró que la postura de su partido es "haber conseguido un pacto político por el cual Javier Lambán tiene que llegar a un acuerdo en dos meses para derogar o modificar el impuesto del agua".

Defendió que Podemos busca "llegar a un acuerdo de máximos con el mayor número de ayuntamientos, organizaciones políticas, vecinos y consumidores". Esta exigencia de pacto por parte de Podemos fue clave dentro de la negociación presupuestaria entre la formación morada, PSOE, CHA e IU. A cambio de la exigencia de Podemos, los socialistas aceptaron estudiar fórmulas para modificar el impuesto sobre la contaminación de las aguas, aunque sin cuestionar la cifra final de recaudación.