Fonz: el Renacimiento cobra vida y trae ilusiones a Fonz

El municipio quiere convertir su patrimonio en atractivo turístico, pero también deposita esperanzas de desarrollo en la futura residencia de mayores, que será una realidad en breve.

El alcalde, Toño Ferrer, frente a las obras de la residencia.
El alcalde, Toño Ferrer, frente a las obras de la residencia.
José Luis Pano

Decía el anterior alcalde de Fonz y custodio del Archivo del Palacio de Valdeolivos, Enrique Badía, que el municipio foncense es el que más palacios y edificios renacentistas tiene de Aragón por metro cuadrado. Esa afirmación la hizo cuando el Ayuntamiento y la Comarca del Cinca Medio pusieron en marcha hace doce años la Feria del Renacimiento, cita consolidada dentro de las ferias y recreaciones históricas de nuestra Comunidad, y con la que Fonz quería poner en valor todo su patrimonio histórico.

Desde luego, hay mucho que mostrar; una monumental iglesia parroquial que acaba de cumplir 400 años, el Palacio de los Barones de Valdeolivos, la joya de la corona del municipio; la fuente de los seis caños, convertida en escudo de la localidad; la Plaza Mayor, declarada en 1976 Monumento Histórico-Artístico, o el palacio de los Duques de Alba, reconvertido en centro de día y anteriormente dependencia de la residencia de ancianos San Blas.

La residencia fue cerrada por el Gobierno de Aragón en la pasada legislatura, debido a las barreras arquitectónicas que presentaba el edificio y a pesar de las gestiones realizadas por el alcalde Toño Ferrer, quien no ha parado de trabajar junto a su equipo de gobierno en los dos últimos mandatos para convertir en realidad el gran proyecto del municipio: terminar la nueva residencia, parada desde 2009. Es el sueño de los vecinos y una infraestructura que, según Ferrer, contribuiría a que Fonz vuelva a superar el millar de habitantes, cifra de la que se ha bajado en el siglo XXI. Hace cien años, la población local era el doble.

Dotar de servicios y de buenas infraestructuras, así como generar una atractiva agenda cultural y de ocio; he ahí los pilares en los que trabaja el ayuntamiento de Fonz. De todos esos servicios, la residencia es el que más horas de trabajo ha ocupado al alcalde, que ahora se siente por fin optimista y confiado en que esta residencia comarcal, que comenzó a construirse en 2006 con el gobierno PSOE–PAR, pueda estar terminada quince años después.

La Comarca del Cinca Medio sacará en breve el pliego de condiciones para adjudicar la finalización de las obras y la gestión del servicio. Según explica Ferrer, cinco empresas solventes están dispuestas a presentarse a la convocatoria. "Todas las semanas llamo al presidente de la Comarca para ver cuando sacan a licitación el pliego de condiciones. Quiero pensar que esta primavera ya deberían estar las obras adjudicadas. Hay empresas que se han ofrecido, han venido con capital para terminarla y gestionarla. Este es un tema que nos ha ocupado muchas horas y los vecinos parece que no se lo acaben de creer, porque siempre hemos recibido buenas palabras, pero los procesos de contratación con la administración son largos", explica el alcalde.

La residencia fue concebida para albergar sesenta camas, aunque el Ayuntamiento encargó un estudio arquitectónico para contemplar hasta diez o veinte más.

Residencia y carretera en 2020

El alcalde confía en que en 2020, si todo va bien, la residencia pueda estar ya en marcha, lo que supondrá a su juicio un antes y un después para la villa. "Llegamos al ayuntamiento en 2011 convencidos de que el proyecto podría relanzar a Fonz; el objetivo es estar entre los principales pueblos de la provincia de Huesca y sobrepasar la barrera de los 1.000 habitantes", cuenta Ferrer.

Ligado a este proyecto, el ayuntamiento ya está trabajando en otro: la construcción de doce viviendas unifamiliares para cualquier vecino y futuros visitantes que, al amparo de la residencia opten por fijar su vivienda en Fonz. "La calidad de vida que hay aquí no se puede comparar con ninguna ciudad", explica el primer edil del municipio.

Las mejoras a Fonz van a venir también con los trabajos que se desarrollarán a lo largo de 2018 en la carretera que conecta con Monzón y la autovía. Otra demanda histórica que, según asegura el Gobierno de Aragón, estará completada en 2020. A ella hay que unir la inminente finalización del local social, que albergará toda la intensa actividad del municipio con su Trobada de Jazz, la Feria del Renacimiento, fiestas de Navidad o los cursos de verano, que este año trajeron a grandes nombres de la política nacional como el secretario de Estado Mario Garcés (PP), Eduardo Madina (PSOE), Carolina Bescansa (Podemos) o Fernando de Páramo (Ciudadanos), entre otros.

En la vecina localidad de Cofita, que forma parte del municipio de Fonz, ya gozan de acceso a internet a través de la fibra óptica y estrenan variante para sacar del casco urbano el tráfico pesado. De esta forma, Fonz encara el siglo XXI con optimismo, sin olvidar su esplendoroso pasado, sobre todo en el Renacimiento, que está sabiendo convertir en motor de turismo cultural. La pega: faltan más servicios hosteleros.

El palacio y archivo de los Barones de Valdeolivos, la gran joya de la corona foncense

Son muchos los palacetes y casas señoriales que jalonan la plaza y las calles de Fonz, y que nos hablan de la importancia histórica de la villa; en la Edad Media fue encomienda templaria, en la Edad Moderna foco de las sublevaciones contra Felipe II por la defensa de los fueros y en la Edad Contemporánea, centro de la resistencia aragonesa ante el invasor napoleónico, tras la caída de Zaragoza. En el palacio de los Barones de Valdeolivos, Pedro María Ric –presidente de la Junta Superior de Defensa de los Sitios de Zaragoza– articuló junto con su esposa –la condesa de Bureta– y el General Palafox la resistencia de la ciudad. De estos hechos dan buena cuenta el archivo del palacio, una referencia obligada para estudiar la Guerra de la Independencia. Pero Casa Ric, como se la conoce, encierra muchos tesoros, que se acumulan en los 250 años que duró esta baronía. El edificio fue donado por la novena y última baronesa, Concepción Otal, al Gobierno de Aragón. La Oficina de Turismo de Fonz se encarga de realizar visitas los fines de semana, algunas de ellas con recreación histórica.

Un albergue que estimula la vida independiente de los discapacitados intelectuales

Fonz es pura historia y, al mismo tiempo, acumula proyectos ilusionantes de futuro. Uno de ellos, es el albergue y escuela de vida independiente La Sabina, que desde hace unos años construye la Asociación Down Huesca con apoyo de instituciones públicas y, sobre todo con la colaboración de muchos padres, que cada sábado acuden a culminar unas obras que se hallan ya muy avanzadas. Junto al impulso de los padres y la ejecución de varios talleres de empleo de albañilería y campos de trabajo, este centro pedagógico –que será pionero en España en el fomento de la autonomía de las personas con discapacidad intelectual– podría ser una realidad en este año que casi empieza. De momento ya ha acogido varios campamentos internacionales, uniendo fuerzas con otras asociaciones similares de Sicilia, Irlanda y Bulgaria, especializadas en el estímulo a jóvenes con síndrome de Down y otras condiciones. Cuando entre en funcionamiento, el albergue dará trabajo a personas con discapacidad intelectual, que gestionarán las plazas de alojamiento; además de esta iniciativa, el centro ofrecerá formación específica encaminada a para potenciar la autonomía de este colectivo.

LOS IMPRESCINDIBLES 

Vino, queso, aceite

El municipio tiene excelentes productos alimenticios de calidad , como los vinos de la bodega Sers en Cofita –de la D. O. Somontano– el aceite de la cooperativa o los quesos y yogures Val de Cinca (imagen), con varios premios en su haber.

Aragonés bajorribagorzano

En Fonz el aragonés está vivo, concretamente la modalidad de bajorribagorzano o foncense. Se usa en la calle y a nivel institucional y se convoca junto a Estadilla y Graus un concurso literario, el Condau de Ribagorza (imagen).

Pedro Cerbuna

Entre los hijos ilustres, cabe destacar al fundador de la Universidad de Zaragoza y obispo de Tarazona, Pedro Cerbuna del Negro. Su figura y logros se recuerdan, entre otros entornos, en la Feria del Renacimiento de junio.

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