Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado se han llegado a plantear si Norbert Feher, conocido también como Igor el Ruso, estaba detrás del crimen de la pareja desaparecida en el pantano gerundense de Susqueda a finales de agosto. Sin embargo, la Guardia Civil lo ha desvinculado porque entiende que en el caso de los dos jóvenes asesinados actuó más de una persona.

El asesino confeso de los guardias civiles del puesto de Alcañiz Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero, así como del vecino José Luis Iranzo, ha reconocido que está en España desde septiembre. El pasado 24 de agosto se dio la voz de alarma de la desaparición de Marc Hernández Pérez y Paula Mas Pruna, de 23 y 21 años, en el municipio gerundense de Osor. Un mes más tarde, el 26 de septiembre, sus cuerpos aparecieron flotando en las aguas del pantano de Susqueda. Las autopsias revelaron que habían sido maniatados, agredidos con arma blanca y asesinados con arma de fuego.  Probablemente una vez muertos, fueron subidos al kayak de la pareja con piedras en sus mochilas y en la embarcación para que esta se hundiera con los cuerpos. 

Desde entonces han pasado casi cuatro meses y nada se sabe sobre quién podía ser el autor o autores de semejante doble crimen ni del móvil que condujo a segar la vida de estos dos jóvenes. Sin embargo, la concordancia en la época en la que entró Norbert Feher a España huyendo de Italia, así como la posibilidad de que hubiera entrado vía Francia, y la forma en que fueron asesinados Marc y Paula han hecho que se llegara a barajar un posible vínculo y que pudiera haberse cruzado la pareja en el camino de Igor el Ruso.

Paula recibió un disparo en la sien, con trayectoria limpia de entrada y salida, con una pistola con una munición de 9 milímetros o similar. Es decir, fue ejecutada. Marc, cuyo cuerpo permaneció 33 días inmerso en el agua, tenía en su espalda un orificio de bala en un lateral, a la altura del hombro, y señales de bala en una mano.