El Museo de Lérida emite un informe "desaconsejando" el traslado de las obras

El Museo de Lérida emitió ayer un informe en el que desaconseja el traslado de las 44 obras de Sijena, aludiendo al "elevado riesgo" que comporta su desplazamiento, y además, pide retrasar su marcha volviendo a poner en entredicho las condiciones de conservación que ofrecen las salas rehabilitadas del monasterio. En ellas, el Gobierno de Aragón ha invertido ya 400.000 euros.

El documento, que da respuesta de forma parcial a la información demandada por el magistrado del litigio, insiste en los daños a los que se exponen algunas  obras, especialmente una de las tres cajas sepulcrales así como los nueve fragmentos de alabastro correspondientes al retablo de la Infancia de Jesús, que resultaron afectados por el incendio sufrido por el monasterio en 1936. En relación a estas piezas, los técnicos señalan que el traslado puede comportar "degradaciones irreparables", ya que, según dicen, cuentan con una gran cantidad de fisuras que los convierten en "objetos intocables por su fragilidad". A lo largo del informe, nada señalan sobre su participación en el dispositivo y únicamente se limitan a dar recomendaciones de carácter técnico, especificando el tipo de embalaje y el transporte más adecuado.

Además de este informe, que se opone a la marcha de los bienes, el propio Consorcio del Museo de Lérida presentó también un recurso de reposición contra la resolución que fija el lunes, día 11, como fecha tope para el traslado. En él, además de diversas consideraciones legales, señalan que la autorización de entrada al espacio dictada por el magistrado del Juzgado nº 1 de Huesca, Antonio Martín, se asemeja a una  "invasión" y "acto propagandístico". De hecho, critican la falta de "limitaciones" al entender que se autoriza la entrada "indiscriminada de muchas personas que no desempeñan ningún papel en el traslado", entre ellos, cargos institucionales de la DGA.

En su providencia, el juez solo autoriza a representantes judiciales y técnicos así como a los agentes de la fuerza pública. A pesar de ello, el organismo insiste en que la falta de restricciones podría llevar a "un acto de ocupación-invasión con fines propagandísticos y políticos a favor del Gobierno de Aragón". En el mismo recurso, también vuelven a insistir en que el fallo es "provisional" y de nuevo, en el daño irreparable que podría conllevar la recuperación forzosa de las obras, advirtiendo incluso al magistrado de que "los daños causados por un error judicial (...) darán derecho a un indemnización a cargo del Estado".

"Alarma social" en Lérida

El Ayuntamiento de Lérida se sumó a esta última oleada de recursos con un escrito remitido ayer a la Audiencia Provincial de Huesca pidiendo anular la ejecución cautelar del envío de los bienes. Lo hace en condición de patrono del Consorcio del Museo Diocesano, donde están retenidas las 44 piezas de Sijena.

Como uno de sus argumentos, el alcalde, Ángel Ros (PSOE),  sostiene que el mandato judicial ha generado una "alarma social muy importante" en la ciudad, hasta el punto de asegurar que afecta a las relaciones ciudadanas y a las de vecindad con Huesca. También dice a que aludir al artículo 155 para justificar la ejecución cautelar vulneraría el propio artículo de la Constitución.