Monzón se ha sumado a la campaña de la Dirección General de Tráfico (DGT) de vigilancia y control de transporte escolar. Desde este lunes y hasta el viernes, agentes de la Policía Local están realizando inspecciones a vehículos y conductores empleados en el sector.

Los controles se centran tanto en los automóviles como en quienes los conducen. En el caso de los autobuses, las inspecciones atienden a si se dispone de las autorizaciones y documentos necesarios, si se cumplen las condiciones técnicas y se dispone de los elementos de seguridad, como cinturones y sistemas de retención.

En lo referente a los conductores, los controles consisten en comprobar los permisos de conducción, así como si se respetan los tiempos de trayecto y los descansos. También se realizan pruebas de consumo de alcohol y drogas.

Según datos facilitados por la DGT, en España, cada día, 230.000 alumnos utilizan el autobús escolar para ir al colegio y volver a casa. Campañas como ésta, que se realizan varias veces al año, tiene como objetivo mantener el nivel de seguridad experimentado hasta el momento.

Los controles, que se están realizando en grandes ciudades y en localidades de toda España, son sorpresa y sirven para comprobar que todos los vehículos de uso escolar cumplen los requisitos que desde el curso 2007-2008 están establecidos por ley.

Entre otras cuestiones, los autobuses tienen que llevar la señal de transporte escolar y contar con un seguro de responsabilidad civil. En cuanto a los pasajeros, los escolares menores de edad, deben ir siempre acompañados durante el trayecto por una persona cualificada.